Página alterna

martes, 4 de abril de 2017

Medios de EEUU estudian cómo destruir el nuevo tanque ruso Armata



Sebastien Roblin, autor de un artículo para el medio estadounidense The National Interest, intentó averiguar si el complejo pesado antitanque de EEUU TOW —bastante popular en el mundo— sería eficaz contra el carro de combate ruso Armata.



Roblin señala que el sistema TOW se utiliza en batallones antitanque de EEUU, al igual que en decenas de otros países. En el Ejército estadounidense, el complejo se instala a menudo en los vehículos de combate M2 y M3 Bradley, así como en helicópteros de asalto de la Marina AH-1 Cobra.

El misil BGM-71 TOW es un medio de destrucción de vehículos blindados de largo alcance. Los complejos más modernos son el TOW-2A y el TOW-2B.

El TOW-2A utiliza, preferentemente, el sistema de control de misil por cable, lo que permite protegerlo de la mayoría de interferencias en el aire. Sin embargo, para dar en el blanco, el tirador debe permanecer inmóvil y guiar el misil hasta que se produzca el contacto con el blindaje o refugio del enemigo.



Al mismo tiempo, incluso una cortina de humo que cubra el objetivo visualmente puede impedir que el disparo sea certero.

El TOW-2A es capaz de destruir el objetivo a una distancia de 3.750 metros con un proyectil que vuela a una velocidad de 180 metros por segundo, lo que requiere más de 20 segundos. Esto significa que a la tripulación del tanque le daría tiempo a reaccionar y realizar maniobras evasivas.

La carga hueca del misil de este complejo destruye un equivalente del blindaje de acero de 900 mm. No obstante, Roblin señala que los tanques modernos están protegidos contra las municiones de carga hueca.



Los vehículos blindados occidentales utilizan el blindaje compuesto Chobham, mientras que los tanques rusos poseen un sistema de protección activa, que hace explotar los misiles cuando se acercan al blanco. Para superar este 'escudo', el TOW-2A utiliza dos ojivas. Los expertos opinan, no obstante, que este método no es muy fiable.

El TOW-2B es capaz de destruir objetivos a una distancia de 4,5 km valiéndose del sistema de guiado de misiles inalámbrico. Sin embargo, incluso la frecuencia protegida no garantiza el bloqueo completo de interferencias.

Al acercarse a la meta, el misil del TOW-2B puede realizar el ataque de dos cargas desde arriba y afectar así a la parte más vulnerable del tanque.

Roblin reconoce, no obstante, que el Armata está muy bien protegido contra los ataques de misiles.



El sistema de protección activa Afganit no solo advierte a la tripulación del peligro, sino que atesora un doble impacto contra el proyectil que se aproxima. El Afganit es capaz de desviar el misil. Unas instalaciones especiales de granadas de humo no solo cubren visualmente el carro de combate, sino que también crean interferencias infrarrojas, bloquean los rayos láser y los radares del enemigo. Este sistema es también eficaz contra los ataques desde arriba.

Además, el Afganit activa automáticamente los interceptores, que deben derribar el cohete enemigo.



Otro sistema de protección es el blindaje reactivo, que hace explosión cuando un misil antitanque se halla a una distancia peligrosa. La deflagración destruye también la carga doble. La experiencia de Siria demuestra la eficacia de este método. Por ejemplo, el tanque T-90 'sobrevivió' a un ataque del misil TOW. El sistema de protección dinámica Kontakt-5 salvó al vehículo. Mientras tanto, la protección del Armata es más moderna.

Si el proyectil estadounidense, de alguna manera milagrosa, llega al casco del blindado, será complicado romperlo. Aunque el Armata es más ligero que el M1A2 Abrams, su blindaje combinado de múltiples capas equivale a una placa de blindaje de acero de 1.200 a 1.400 mm de espesor, lo que no está al alcance del TOW-2A.

Para romper la defensa de múltiples capas del Armata hacen falta probablemente varios proyectiles. Pero incluso si el ataque se realiza desde arriba, donde el blindaje es más fino, la tripulación podrá sobrevivir y retirar el tanque del campo de batalla.

El autor observa que es posible saber a ciencia cierta el efecto de un ataque del TOW contra un Armata solo si se encuentran en el campo de batalla. "Esperamos que este encuentro nunca se produzca", resume con prudencia Roblin.

No hay comentarios:

Publicar un comentario