La liberación de la ciudad de Márinka es una "gran victoria" para Rusia

La liberación de la ciudad de Márinka por parte de las fuerzas rusas aumenta significativamente su impulso para seguir adelante, dijo a Sputnik el exoficial de inteligencia del Cuerpo de Marines de Estados Unidos e inspector de armas de la ONU, Scott Ritter.

El lunes (25 de diciembre), el ministro de Defensa de Rusia, Serguéi Shoigú, anunció que las Fuerzas Armadas rusas habían liberado la ciudad de Márinka, un asentamiento fuertemente fortificado situado en las afueras de la ciudad de Donetsk.

"En el transcurso de acciones ofensivas activas, los destacamentos de asalto del grupo Sur han liberado hoy completamente la localidad de Márinka, al suroeste de [la ciudad de] Donetsk", dijo Shoigú al presidente ruso Vladímir Putin durante la sesión informativa del lunes.

En declaraciones a Sputnik, Scott Ritter recordó que desde Márinka, una ciudad de unos 9.000 habitantes, las fuerzas ucranianas llevaron a cabo "bombardeos despiadados contra la población civil de Donetsk y sus alrededores".

"Capturar Márinka y eliminar la fuente de este fuego de artillería y mortero representa una gran victoria moral para las fuerzas rusas", señaló Ritter.

Calificó la liberación de Márinka como "parte del esfuerzo concertado que está llevando a cabo el ejército ruso para crear una situación para los civiles de Donetsk, donde puedan vivir en paz sin el temor de los bombardeos diarios que han matado a tantos civiles inocentes, incluidos niños".

Según Ritter, Márinka es solo "una de las batallas de las fuerzas rusas" que están expulsando a los ucranianos de ciudades, pueblos y aldeas que antes estaban fuertemente defendidas, lo que, a decir de él, significa que la iniciativa estratégica está en manos de Rusia.

Refirió que la industria de defensa rusa "está a toda marcha" produciendo nuevo equipamiento militar en cantidades significativas para las fuerzas rusas que están desplegadas en el Donbás y los nuevos territorios rusos de Jersón y Zaporozhie. "En este momento, parece que Rusia sostendrá y mantendrá la ventaja estratégica", según Ritter.

En cualquier caso, reiteró, "una cosa es segura: la caída de Márinka es una gran victoria para Rusia".

"Moralmente, detiene la fuente de los bombardeos diarios contra los civiles inocentes de Donetsk. Y segundo, representa otra victoria más de las Fuerzas Armadas rusas no solo sobre las fuerzas de Ucrania, sino también sobre el Occidente colectivo y la OTAN", concluyó Ritter.