Los verdaderos impulsores de la agenda gay son los jesuitas

Son ellos los verdaderos impulsores y  no solo la élite ocultista judía

ANTES QUE NADA, PARA QUIENES SE PREOCUPAN POR ESTE TEMA DE LA HOMOSEXUALIDAD, LES RECOMIENDO HACER LO QUE POCOS HACEN, INVESTIGARLO. Y QUE MEJOR FORMA QUE ESCUCHAR ESTE DEBATE ENTRE DOS EMINENCIAS SOBRE EL TEMA.

Aunque el agente desinformador Rafael Palacios te dirá lo contrario y culpará solamente a ciertos judíos, lo cierto es que fueron y son los jesuitas quienes han introducido la agenda gay. No fueron acaso los caballleros templarios, de quienes los jesuitas son prole, los pioneros en fomentar el homosexualismo, lesbianismo y transgenero en el occidente moderno? Si fuera tambien una cuestión de poder y autoría tanto intelectual como material, son obviamente los jesuitas quienes mucho mas que los judíos poseen. A continuación les recordaré la historia de la agenda gay de los jesuitas.

Robert Carter, derecha, con Dan McCarthy, izquierda, Bernard Lynch y John McNeill en una marcha del orgullo gay en la década de 1980.El reverendo Robert Carter, quien en la década de 1970 fue uno de los primeros sacerdotes católicos en el país en declarar públicamente que era gay y que ayudó a fundar el Grupo de Tareas Nacional de Gays y Lesbianas (National Gay and Lesbian Task Force http://www.thetaskforce.org/ ), murió el 22 de febrero en el Bronx. Tenía 82 años.

Su muerte, en un centro de atención de la salud jesuita, fue confirmada por el Rev. Thomas R. Slon, asistente ejecutiva del provincial de la Provincia de Nueva York de la Compañía de Jesús.

La homosexualidad del Padre Carter fue muy públia. En octubre de 1973, el Dr. Howard J. Brown, un ex administrador de servicios de salud de la ciudad de Nueva York, anunció que era homosexual y que estaba formando una organización de derechos civiles para los hombres y mujeres homosexuales. Entonces llamó el Grupo de Trabajo Nacional Gay, que más tarde se convirtió en el Grupo de Trabajo Nacional de Gays y Lesbianas.

Un artículo sobre el grupo en The New York Times, dijo: "Un número de organizaciones de homosexuales y lesbianas han estado representados en la junta directiva. Uno de los miembros fue el Rev. Robert Carter, sacerdote jesuita y profesor de teología histórica ".

Poco después recibió la visita de un subprovincial de la orden jesuita. "Parece que tenían miedo que hubiera tenido un brote psicótico o algo así," el Padre Carter escribió en un libro de memorias publicado.

Aunque se pidió su expulsión por airados "jesuitas, padres y ex alumnos de nuestras escuelas," el Padre Carter continuó, no estaba disciplinado. En aquellos días, la Iglesia y la Compañía de Jesús tenian mucha aceptación de los gays.

La iglesia sigue manteniendo que, si bien la atracción homosexual es "desordenada", las personas gay que son célibes no son intrínsecamente pecaminoso. En 2005, sin embargo, el Vaticano publicó un documento diciendo que la iglesia no admitiría a un seminario u ordenaría a "los que practican la homosexualidad, presentan tendencias homosexuales profundamente arraigadas o apoyan la así llamada 'cultura gay'".

El Padre Carter ayudó a fundar el capítulo de Nueva York de Dignity, un grupo de apoyo para los católicos homosexuales. En 1972, el Rev. John McNeill, que fue sede de la primera reunión del capítulo en la capilla de los jesuitas en la calle 98 Oeste de Manhattan.

"Me refiero a él como el corazón de la Dignidad," dijo el Padre McNeill, autor de "La Iglesia y el Homosexual" (Beacon, 1976), dijo en una entrevista. "Yo estaba haciendo todo lo escrito, pero él estaba en la primera línea, la reunión con la gente, el asesoramiento de personas."

Cuando las autoridades católicas dijeron que su grupo no podría usar las propiedades de la iglesia, el Padre Carter celebró la Santa Misa en apartamentos de Manhattan. Dirigió ceremonias de bendición para las parejas homosexuales. Él testificó en apoyo de la ley de derechos de los homosexuales propuesto por el alcalde Edward I. Koch antes de que fuera aprobada por el Ayuntamiento en 1986. Instó a su grupo para marchar en desfiles del orgullo gay y marchó él mismo, con su cuello clerical.

A pesar de que era un erudito clásico, fue también un trabajador social capacitado que aconsejó a los sacerdotes homosexuales y centenares de laicos católicos. "Como he tratado de conciliar el ser gay y católico," Brendan Fay, un veterano activista de derechos gay, dijo en una entrevista, "Bob Carter ayudó a moverse del auto-odio a la auto-aceptación y continuación a un lugar del activismo gay. Era como un Harvey Milk católica".

Robert Earl Carter nació en Chicago el 27 de julio de 1927, hijo de Earl y Ila Gracia Smith Carter. Su padre logró varias tiendas de música. Le sobreviven su hermana, Nancy Glader de perspectiva Heights, Illinois

Los padres de Padre Carter eran protestantes que adoraban en una serie de denominaciones cuando él creció. Luego, en la Universidad de Chicago, leyó el semiautobiografico "Retrato del artista como un hombre joven.", de James Joyce se le presentó, escribió, que "la centralidad de la religión católica en la historia de la civilización occidental."

Se graduó en junio de 1946 y al día siguiente fue recibido en la Iglesia Católica. Tres años más tarde, completó una maestría en estudios griegos en su alma mater, y en 1953 recibió su doctorado allí.Entró en la Compañía de Jesús en 1954 y fue ordenado sacerdote en 1963.

Padre Carter llegó a ganar un título de maestría en trabajo social de Columbia en 1981. En 1985 él estaba aconsejando pacientes con SIDA en el Hospital Lincoln en el Bronx, que más tarde se convirtió en un supervisor del programa ambulatorio SIDA en el Centro Hospitalario Bellevue en Manhattan.

Para él, no existe contradicción entre la homosexualidad y el cristianismo.

En sus memorias, el Padre Carter escribió: "Puesto que Jesús tenía comunión con los marginados y los pecadores sociales, los rechazados por las autoridades religiosas de su tiempo, me considero haber sido más plenamente un jesuita, un" compañero de Jesús, "cuando salí públicamente como gay, uno de los rechazados sociales de mi tiempo. Fue sólo por nuestra llegada que los estereotipos negativos de la sociedad serían vencidos y nos gustaría ganar la aceptación social. "

A pesar de lo que diga este Jesuita, lo cierto es que la Biblia dice:

Romanos 1:26-27: “Por esto Dios los dejó ir a pasiones vergonzosas; pues aun sus mujeres cambiaron el uso natural por el que es contra naturaleza, y de igual modo también los hombres, dejando el uso natural de la mujer, se encendieron en su lascivia unos con otros, cometiendo hechos vergonzosos hombres con hombres, y recibiendo en sí mismos la retribución debida a su extravío.”

1 Corintios 6:9: “¿O no saben que los injustos no heredarán el reino de Dios? No se dejen engañar: ni los inmorales, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los homosexuales”.
http://www.magis.iteso.mx/node/465

“Las lesbianas y los gays también forman parte del cuerpo de Cristo” - Donal Godfrey SJ.

El jesuita Donal Godfrey colabora desde hace casi 20 años en la parroquia Most Holy Redeemer (MHR), una comunidad que incluye feligreses sin importar su identidad de género, su raza, su estatus social ni su orientación sexual.

Pero no siempre fue así. En 1970, esta parroquia ubicada en el corazón del distrito Castro, la emblemática zona gay de San Francisco, California, vivía las hostilidades de los habitantes de este barrio tradicional hacia los grupos homosexuales, a los que consideraban invasores.

Sobre la historia de esta comunidad, Godfrey publicó un libro en 2008, titulado Gays and Grays: The Story of the Gay Community at Most Holy Redeemer Catholic Parish, en el que relata que cuando la parroquia estaba prácticamente muerta (durante la década de 1970), el entonces párroco Tony McGuire abrió la Iglesia a lesbianas y hombres homosexuales. “Era una comunidad en la que había mucha soledad, conformada principalmente por mujeres heterosexuales y hombres gay. Para acercar a la gente se organizaban reuniones en las cuales los asistentes compartían sus experiencias y perspectivas”.

Otro fenómeno que marcó la vida de la parroquia fue la aparición del VIH. “El barrio fue prácticamente devastado. La gente empezó a perder a sus amigos y tanto heterosexuales como homosexuales colaboraron brindando sobre todo acompañamiento espiritual a las personas enfermas”, relata Godfrey. “Gays y heterosexuales encontraron una nueva forma de relacionarse”.

Donal Godfrey señala que “la homosexualidad es una realidad en el mundo, nos guste o no”. Tenemos la opción de pretender que esta realidad no existe, o encontrar la manera de asumirla y unirla a la Iglesia, pues “las lesbianas y los hombres gay también forman parte del cuerpo de Cristo”.

Para Godfrey, quien trabaja en la Universidad de San Francisco, es importante animar el diálogo y el respeto a la dignidad de todas las personas. Es decir, centrar la atención en si la persona es buena o mala, en lugar de hacerlo en si es homosexual o no.

Los jesuitas, los verdaderos controladores de la ONU, la UNESCO y la Agenda Internacional Gay (ligadas entre sí) están trabajando para favorecer la mayor manifestación de las Tinieblas sobre este mundo.

Y esto incluye evidentemente, la aprobación de la Homosexualidad.

Es lo que hemos llamado, el DESTAPE de las Tinieblas, que ya tienen el descaro de descubrirse horriblemente frente el mundo.

En Chile, el cura jesuita Felipe Berríos se ha pronunciado a favor del proyecto de ley de los ex conservadores de Derecha, "Acuerdo de Vida en Común" que regula y formaliza las uniones de hecho, los que "conviven" eso implica las uniones homosexuales.    FUENTE

La Universidad Jesuita de Chile, la Universidad Alberto Hurtado, prestó sus salas para la realización
de un foro en favor de los LGBT.

http://www.movilh.cl/index.php?option=com_content&task=view&id=945&Itemid=1