Últimamente los medios internacionales discuten activamente sobre el nuevo sistema de defensa aérea ruso S-500 y afirman que Moscú oculta intencionadamente sus características para aumentar las ventas de los S-400. ¿Pero cuán realistas son estas afirmaciones?
Para responder a esta pregunta, Sputnik habló con el coronel retirado y analista militar del diario Komsomolskaya Pravda, Víktor Baranets. El experto explicó que no puede desvelar todas las características del nuevo sistema de defensa aérea insignia de Rusia, pero sí compartió algunos detalles.
De acuerdo con Baranets, el nuevo sistema vendrá a reemplazar al S-400 que el Ejército ruso estuvo recibiendo desde hace varios años y que se está vendiendo a países tales como China, India y Turquía. Consecuentemente, el S-500 supondrá un considerable avance en comparación con su antecesor.
Una de las características en las que el nuevo sistema supera al S-400 es su alcance de detección. Mientras que el sistema actual tiene un alcance de 400 kilómetros, el futuro sistema podrá detectar a los objetivos enemigos a una distancia de hasta 600, e incluso 700 kilómetros.
"Ello significa que tendrá más oportunidades de fijarse en el blanco y derribarlo mucho más lejos de su objetivo", remarcó el experto.
También destacó que el equipamiento radioelectrónico del S-500 tendrá capacidades especiales que lo elevarán a un nuevo nivel. Estará dotado de un sistema de lucha radioelectrónica que permitirá detectar a sus objetivos y realizar lanzamientos de misiles sin revelar su propia ubicación, lo cual es de vital importancia para su supervivencia.
Otro avance del S-500 es la variedad de misiles con los cuales podrá operar. Aparte de los misiles ya empleados en los sistemas S-400, el nuevo complejo tendrá misiles adicionales diseñados para abatir blancos que vuelan a mayores velocidades y altitudes.
Además, podrá calificar automáticamente a los blancos dependiendo del nivel de peligro que representan. De tal modo, los operarios podrán eliminar primero a los blancos más amenazantes. "En caso de que haya varios blancos, como por ejemplo un misil balístico, un Tomahawk y un avión, el sistema automáticamente avisará a los operadores sobre los blancos prioritarios", explicó.
"Lo más importante es que los misiles de los S-500 ya están en sus fases finales de pruebas. Pero los provocadores estadounidenses, que no saben del tema, ya empiezan a estropear la imagen del nuevo sistema", dijo.
De acuerdo con él, algunos medios de EEUU empezaron a afirmar que Rusia supuestamente oculta los datos del S-500 para aumentar la efectividad de venta del S-400 y evitar que los compradores cancelen las adquisiciones a la espera del S-500. Pero "no tiene nada que ver con la realidad", indicó.
Según explicó el entrevistado, los sistemas S-500 primero se destinarán al Ejército ruso y solo después saldrán a la venta.
Esta normativa establece que los armamentos de fabricación rusa se venderán a los compradores en el extranjero solo después de que el Ejército de Rusia esté saturado con ellos. Y es precisamente algo que está ocurriendo, concluyó Baranets
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