El ciclón Dorian ha sido catalogado como un huracán de categoría 5, este domingo, luego de que alcanzara vientos máximos sostenidos de 260 kilómetros por hora.
Según indica el Centro Nacional de Huracanes (NHC, por sus siglas en inglés) de EE.UU., la frontera del ojo de este catastrófico huracán está a punto de azotar las islas Ábaco, en Bahamas, con vientos devastadores.
Esta nueva información provino de mediciones realizadas por un avión cazatormentas que incursionó hasta el ojo del huracán.
El sábado, el Centro Nacional de Huracanes informó que el ciclón se ha apartado de su trayectoria prevista, y ahora se está dirigiendo a los estados de Georgia y las Carolinas.
El vicepresidente de EE.UU., Mike Pence, dijo que la Casa Blanca estaba monitoreando de cerca a Dorian y que los estados en riesgo tienen disponibles los recursos que necesitan.
Sin embargo, en Florida la gente queja de la situación. Los residentes han comprado agua embotellada, madera contrachapada y otros suministros. Algunas estaciones de servicio, incluso, se quedaron sin combustible por la alta demanda.
Las autoridades locales en Bahamas han declarado estado de emergencia hace días y han evacuado varias personas.
Residentes de varias zonas hacia las que se dirige el ciclón, aún no se han recuperado por completo de la devastación del huracán Michael, del año pasado, ni del Irma, que azotó la zona en el 2017.
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