Un alto asesor del Líder de Irán resalta que la mortal explosión que sacudió Beirut, capital de El Líbano, fue, con seguridad, un acto del régimen de Israel.
El general de brigada Hosein Dehqan, asesor en Asuntos de la Industria de la Defensa del Líder de la Revolución Islámica de Irán, el ayatolá Seyed Ali Jamenei, ha concedido este domingo una entrevista a la cadena china Phoenix, en la que ha enfatizado que lo único que se espera de Israel es que cometa crímenes.
Dehqan ha dicho que la explosión en Beirut, acontecida el pasado 4 de agosto y ocasionada por 2750 toneladas de nitrato de amonio, fue perpetrada por los israelíes, ya que su objetivo era un almacén de alimentos de los libaneses, a fin de generar disensiones entre el pueblo y el Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá).
“¿Cuál es el mensaje cuando se destruye el suministro de alimentos de un país golpeado por una crisis que ya genera problemas en este campo, excepto el de presionar a la gente para lograr otro fin? En mi opinión, esta acción es 100 % israelí”, ha subrayado.
De igual modo ha sostenido que, cuando los israelíes hacen algo, rápidamente inventan una historia para que la medida parezca verosímil; por ejemplo, ha proseguido, se dice que Hezbolá y la Resistencia son los causantes de todos los males que aquejan a la nación libanesa y que estos explosivos les pertenecían.
“Eso mientras la nación libanesa considera a Hezbolá parte de sí y Hezbolá sirve a sus intereses de seguridad. Hezbolá nunca ha actuado contra el pueblo libanés”, ha destacado, para luego denunciar que la meta de los israelíes es movilizar a los libaneses contra este movimiento y “finalmente desarmarlo”.
El también exministro de Defensa de Irán ha asegurado que, sin embargo, los libaneses responderán como corresponde a los israelíes.
El viernes, el secretario general de Hezbolá, Seyed Hasan Nasralá, puso énfasis en que Israel pagará un “alto precio” si las investigaciones revelan que dicho régimen está relacionado con la fatídica explosión, que se saldó con más de 170 muertos y más de 6000 heridos.
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