Según ha reportado este jueves el canal estatal yemení Al-Masirah, el nuevo equipo, que incluye misiles balísticos, drones y artillería, así como armas antitanques, ligeras y pesadas, fabricado por expertos militares nacionales, se ha presentado en una exhibición en la capital de Yemen, Saná.
Varios funcionarios militares y políticos, entre ellos Mahdi al-Mashat, presidente del Consejo Político Supremo de Yemen, han participado en el evento.
Señalando que el equipo militar se utilizará para enfrentar al enemigo, Al-Mashat ha felicitado a las Fuerzas Armadas yemeníes por sus logros en el ámbito militar, que los ha considerado como “una victoria para la nación”.
En otro evento realizado esta misma jornada, el general de brigada Aziz Rashed, portavoz del Ejército yemení, ha asegurado que las fuerzas del país continuarán sus ataques de represalia en lo profundo de Arabia Saudí hasta que el régimen de los Al Saud termine su agresión y levante el bloqueo a Yemen.
“El Ejército yemení quiere transmitir un mensaje a Arabia Saudí. Si sigue ocupando y asediando Yemen, a partir de hoy, ni los [sistemas de defensa antimisiles] Patriot, ni los [helicópteros] Black Hawk podrán salvaguardar a Riad”, ha aseverado.
Según Rashed, ni Estados Unidos, Israel y los Estados occidentales podrán forzar la victoria de Arabia Saudí, porque sus armas estratégicas no podrán contrarrestar la voluntad militar del Ejército yemení y los comités populares.
Los ataques a Yemen han dejado decenas de miles de muertos desde marzo de 2015 y el asedio ha llevado a la mayor parte de la población al borde de hambruna.
No obstante, el Ejército yemení y el movimiento popular Ansarolá que defienden el país frente a la brutal campaña militar saudí desde entonces, han prometido expulsar a los ocupantes de todo el territorio yemení, tal y como lo están haciendo en los últimos meses en la provincia de Marib (centro-oeste), ganando cada día más terreno.
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