China simula un ataque aéreo contra un portaviones estadounidense, poniendo en alerta los radares del sistema de defensa aérea de Taiwán.
Una flota de aviones de combate chinos, compuesta por unos 25 cazas y bombarderos con capacidad nuclear ―entre ellos 14 cazas J-16 y cuatro bombarderos pesados H-6K―, simuló un ataque a un portaviones de EE.UU., activando los radares del sistema de defensa aérea de Taiwán, según han indicado este martes varios expertos.Esta maniobra militar coincidió con la presencia de un grupo estadounidense de ataque, liderado por el portaviones USS Theodore Roosevelt, al norte de Filipinas, y se produjo horas después de que el secretario estadounidense de Estado, Antony Blinken, reafirmara el “compromiso serio” de Washington con Taipéi y su autodefensa.
Desde septiembre 2020, Pekín ha intensificado sus operativos militares en la Zona de Identificación de Defensa Aérea Autodeclarada (ADIZ, por sus siglas en inglés) para dejar clara su postura a Taiwán respecto a sus aspiraciones independentistas y el carácter de sus relaciones con EE.UU.
En concreto, los vuelos de la flota china se han concentrado en las proximidades del suroeste de la ADIZ, cerca del canal de Bashi y a la entrada del mar de la China Meridional.
Asimismo, Chieh Chung, un investigador de la Asociación para la Prospectiva Estratégica de Taipéi, ha señalado que el Ejército chino ha puesto más énfasis en los “entrenamientos ante un combate real” y ve el canal de Bashi como una ubicación estratégica crucial, pues otorga acceso al océano Pacífico Occidental.
De igual modo, ha indicado que los datos que se han publicado acerca del seguimiento del grupo que acompaña al USS Theodore Roosevelt lo situaron al norte de la isla filipina de Luzón.
Las tensiones entre Pekín y Taipéi aumentaron considerablemente durante el mandato del expresidente estadounidense Donald Trump (2016-2020), quien dio prioridad al fortalecimiento de las relaciones con Taiwán, incluida la venta de armas. El actual presidente del país norteamericano, Joe Biden, también tiene intención de seguir la política de Trump respecto a China.
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