Un vídeo muestra una potente explosión que habría sido causada por el impacto de un misil hipersónico ruso Hermes en las posiciones de los terroristas en Siria.
Según informa este viernes el portal ruso de aviación Avia.Pro, se cree que las Fuerzas Armadas de Rusia habrían hecho uso de una nueva y avanzada arma hipersónica, por primea vez, en Siria, luego de que se registrara una potente explosión, hace unos días, en el territorio controlado por grupos terroristas afincados en la provincia noroccidental siria de Idlib.El medio ruso anota que, inicialmente, se asumió que la explosión podría haber sido ocasionado por el impacto de bombas inteligentes de Krasnopol, aunque, posteriormente se surgió la idea de que podría haber sido por un ataque kamikaze de un vehículo aéreo no tripulado ZALA Lancet.
Sin embargo, añade, ambas teorías se desvanecieron en cuanto se produjo una segunda explosión, aún más potente que el primer estallido, que destruyó por completo unas instalaciones terroristas en dicha región.
De hecho, el informe recoge que los expertos han descartado que estas detonaciones fueran provocadas por el uso de bombas inteligentes Krasnopol o el dron Lancet, ya que sostienen, por un lado, de que no existe ninguna posesión extremista que estuviera tan cerca de las bases aéreas rusas desde donde se pudiera lanzar los mencionados proyectiles explosivos, y, por otro lado, dado la naturaleza del terreno, es casi seguro de que se hubiera notado del vuelo del dron kamikaze ruso.
Los analistas, en paralelo, se han enfocado su atención sobre el hecho de que la fuerza de carga de la explosión en las instalaciones de los terroristas fue tan intensa que no solo tras su destrucción dejó un boquete en la superficie, sino que su onda expansiva destruyó por completo los equipamientos militares cercanos.
De acuerdo a datos oficiales del Ministerio de Defensa de Rusia, el sistema de misiles hipersónicos ruso Hermes, con el que posiblemente fue lanzado el misil, es capaz de alcanzar objetivos a distancias de hasta 100 kilómetros y, por su característica de velocidad hipersónica, el misil tiene una energía de impacto tremenda, que podría causar una explosión a gran escala.
Rusia ofrece apoyo militar y logístico al Ejército sirio, que está ultimando sus preparativos para hacerse con el pleno control de las zonas noroccidentales del país árabe, los últimos feudos de las bandas extremistas, especialmente las provincias de Latakia e Idlib.
De hecho, en los últimos meses, las fuerzas sirias, respaldadas por la Aviación rusa, han intensificado sus operaciones antiterroristas en dicha zona, ante las violaciones cometidas por las bandas extremistas del alto el fuego acordado, el 5 de marzo de 2020, por el presidente de Rusia, Vladimir Putin, y su homólogo turco, Recep Tayyip Erdogan, para Idlib.
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