“Nuestro primer barco en salir de Irán cargado con materiales ha completado todo su trabajo y navegará en cuestión de horas”, ha dicho este jueves el secretario general del Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá), en un discurso televisado con motivo del día de Ashura, que marca el aniversario del martirio del tercer Imam de los chiíes, el Imam Husein (la paz sea con él).
Nasralá también ha prometido que “llegarán más barcos desde Irán”, para luego explicar que la “prioridad” del cargamento es el diésel que es necesario para hacer funcionar los generadores eléctricos de El Líbano que apenas tiene electricidad desde hace una semana, cuando el Banco Central anunció el fin de los subsidios a los carburantes.
Tras subrayar que la crisis política y económica que vive El Líbano no es solo el resultado de problemas internos, ha declarado que la importación de combustible es por la culpa de quienes impusieron la “guerra económica” a El Líbano, una situación que beneficia a Israel, y acusó a la embajada estadounidense en Beirut, la capital libanesa, de dirigir una “guerra económica y mediática” contra el país mediterráneo.
En este sentido, ha advertido a Washington y el régimen de Tel Aviv que no cometan ningún error, apuntando que “no queremos un enfrentamiento”, y ha destacado que el barco iraní será considerado como el “territorio libanés” desde el momento que zarpe hacia el país árabe.
“Desde el momento en que el barco comience a navegar, [Hezbolá] lo considerará suelo libanés”, ha avisado Nasralá a los enemigos de una posible respuesta en caso de que entorpezcan el envío.
El Líbano enfrenta una escasez de combustible desde hace meses por la crisis política y económica que vive, la electricidad pública del país llega apenas un par de horas al día, y las autoridades gubernamentales han advertido sobre la posibilidad de apagones generalizados debido a esta vital sustancia en las centrales eléctricas del Estado árabe.
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