“La OTAN nunca ha prometido no expandirse […] Y los aliados niegan categóricamente haber prometido algo así”, declaró el jueves el jefe de la Alianza Atlántica en una entrevista con la agencia noticiera Deutsche Presse-Agentur (DPA).
Las declaraciones de Stoltenberg se produjo a raíz de las propuestas ofrecidas desde Rusia al Occidente para establecer garantías necesarias de seguridad con los Estados miembros de la Alianza Atlántica, y que la OTAN no se expandiera hacia el este ni desplegara ningún tipo de armas ofensivas en Europa del Este.
Horas antes, en su conferencia anual realizada el mismo jueves, el presidente ruso, Vladimir Putin, afirmó que la alianza había “engañado” a Rusia en varias ocasiones, y había realizado “cinco oleadas de ampliación” cerca de la frontera rusa.
Moscú considera la expansión militar de la OTAN cerca de sus fronteras como una amenaza directa a su seguridad nacional.
Rusia considera la expansión hacia el este y el despliegue de armas ofensivas de la OTAN cerca de sus fronteras como sus “líneas rojas” y por eso, le hizo al Occidente propuestas de garantías de seguridad para evitar cualquier confrontación militar.
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