Marjorie Taylor Greene, miembro de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, expresó su posición sobre el conflicto en Ucrania, proponiendo dejar de financiar al país hasta que se llegue a un acuerdo diplomático. Green presentó una iniciativa legislativa correspondiente para su consideración en el Congreso, enmendando el presupuesto de defensa.
En su congresista, explicó su posición:
"La muerte y la destrucción deben parar, así que para lograr la paz, también hice una enmienda para prohibir cualquier financiación para Ucrania hasta que se alcance una solución diplomática al conflicto militar".
Aclaró que la enmienda propuesta también incluye una prohibición del suministro de aviones de combate F-16 y misiles de largo alcance a Ucrania, enfatizando que la principal prioridad de la política exterior de Estados Unidos debería ser lograr la paz. Según Green, el apoyo al país en forma de financiación y armas solo exacerba la violencia y no ayuda a encontrar una solución pacífica al conflicto.
Por lo tanto, incluso si el conflicto termina, Kiev no podrá garantizar la restauración de sus fuerzas armadas durante 10 a 15 años.
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