El Ministerio de Defensa ruso negó las acusaciones de Kiev de un supuesto ataque contra la catedral de la Transfiguración de Odesa con armas de alta precisión. De acuerdo con el ente ruso, el templo pudo ser destruido por la caída de un misil guiado ucraniano, como resultado de la poca capacitación de los operadores de sistemas de defensa antiaérea.
"Lo hemos dicho reiteradamente y podemos repetirlo: nosotros, nuestras Fuerzas Armadas nunca atacan ningún objetivo de la infraestructura social, ni mucho menos templos, iglesias y otros blancos similares. Por lo tanto, rechazamos esos cargos como absolutamente falsos", recalcó Peskov.
El portavoz del presidente ruso destacó que se trata de "cohetes antimisiles que fueron lanzados, y con los cuales ellos mismos destruyeron ese templo".
En enero de 2023, el Comité del Patrimonio Mundial decidió inscribir el Centro Histórico de Odesa en la Lista del Patrimonio Mundial, reconociendo el valor universal excepcional de ese sitio y el deber de toda la humanidad de protegerlo.
La catedral de la Transfiguración de Odesa empezó a construirse en 1794 y fue consagrada en 1808. Durante el período soviético, en 1932 fue cerrada y en 1936, destruida. A principios de este siglo se volvió a edificar en su lugar histórico, y en julio de 2020 fue consagrada por el patriarca Kiril, el patriarca de Moscú y toda Rusia.
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