"Crece el número de idiotas dirigentes en los países de la OTAN", así comenzó la publicación del político, que ejerció la presidencia rusa de 2008 a 2012, fue primer ministro de 2012 a 2020 y es el líder del partido gobernante Rusia Unida.
En particular, Medvédev tildó de "cretino" al nuevo ministro de Defensa británico, Grant Shapps, por su decisión de trasladar los programas de adiestramiento de soldados ucranianos al territorio de la propia Ucrania.
"O sea, por convertir a sus instructores en objetivo legítimo para nuestras Fuerzas Armadas. Sabiendo perfectamente que serán destruidos de forma implacable, ya no en calidad de mercenarios, sino como especialistas británicos de la OTAN", aclaró el alto funcionario.
Medvédev arremetió además contra la presidenta del comité de Defensa del parlamento alemán, Marie-Agnes Strack-Zimmermann, a quien calificó de "otra tonta" por exigir un suministro inmediato de misiles Taurus a Ucrania a fin de que pueda atacar el territorio de Rusia y debilitar su Ejército.
"Dice que ello está en consonancia con el derecho internacional. También lo estarán entonces los ataques a las plantas alemanas que fabrican esos misiles", advirtió.
Después de todo, resumió Medvédev, "estos imbéciles nos están empujando activamente a una Tercera Guerra Mundial".
Rusia lanzó la operación militar especial en Ucrania en respuesta a la solicitud de las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk, previamente reconocidas por Moscú como Estados soberanos, para que se les preste ayuda frente al genocidio por parte de Kiev. Numerosos países condenaron la operación y apoyan a Ucrania con entregas de armas, donaciones y ayuda humanitaria.
Desde Moscú advirtieron en reiteradas ocasiones que la OTAN está "jugando con fuego" al suministrar armamento a Kiev, y que los convoyes extranjeros con armas serían "objetivo legítimo" para su Ejército apenas crucen la frontera.
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