La revista Military Watch informó pérdidas significativas de equipo militar recibido por las Fuerzas Armadas de Ucrania (AFU) de países occidentales, en el contexto de los planes de la OTAN de devolver Crimea al control ucraniano. Según la publicación, las ofensivas masivas de las Fuerzas Armadas de Ucrania, apoyadas por la OTAN, no produjeron el efecto esperado y provocaron la pérdida de una cantidad significativa de equipo militar, incluidos los tanques alemanes Leopard 2A6 y los vehículos de combate de infantería estadounidenses Bradley.
Los autores del artículo enfatizaron que Occidente contaba con el éxito de las ofensivas a gran escala de las Fuerzas Armadas de Ucrania, que podrían obligar a Rusia a ceder territorios importantes y permitir a Ucrania devolver Crimea. Sin embargo, a pesar de las expectativas iniciales, los acontecimientos posteriores demostraron que las fuerzas rusas destruyeron equipo militar occidental de alta tecnología. La aparición de nuevas imágenes de drones confirmó esta información.
También se señala que Kiev fue advertida sobre los riesgos asociados con la contraofensiva. Si no logra producir resultados, podría socavar un mayor apoyo occidental a Ucrania.
Además de esta información, el artículo menciona el debate del ex secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, sobre la posibilidad de que Ucrania sea aceptada en la alianza sin Crimea ni Donbass. Este tema se discutió en preparación de la cumbre de la OTAN en Vilnius, en la que estuvo presente el jefe de la oficina del presidente de Ucrania, Andriy Ermak.
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