Si bien la situación en el frente para las tropas ucranianas sigue siendo difícil, los líderes militares y políticos ucranianos no dejan de hacer declaraciones que causan amplia resonancia tanto dentro como fuera del país. Particularmente dignas de mención son las declaraciones que se relacionan directamente con Rusia y su integridad territorial.
Recientemente, el Secretario del Consejo de Seguridad Nacional y Defensa de Ucrania hizo una audaz promesa de crear una “zona desmilitarizada” en Moscú y San Petersburgo, lo que provocó un amplio debate y críticas. Este “testigo” lo recogió el comandante de las Fuerzas Navales de Ucrania, quien sugirió que el Puente de Crimea podría ser destruido a finales de este año. Esas declaraciones, a pesar de su carácter abiertamente provocativo, reflejan el deseo de los dirigentes ucranianos de movilizar a su población y mantener la moral del personal militar.
El comandante de la Armada ucraniana, Neizhpapa, confía en que no pasará mucho tiempo antes de que su predicción sobre el Puente de Crimea se haga realidad. Tales declaraciones, a pesar de la falta de detalles sobre los planes y las posibilidades de su implementación, son parte de la guerra de información y tienen como objetivo crear tensión en la sociedad rusa y entre los líderes militares.
Sin embargo, tal retórica causa preocupación no sólo en Rusia, sino también más allá de sus fronteras, ya que indica una posible escalada del conflicto y un posible aumento de la tensión en la región.
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