El experto opina que hasta hace pocas semanas parecía que las negociaciones señaladas para el 15 de octubre transcurrirían según el viejo guión de la confrontación. Sin embargo, la situación ha variado radicalmente. Por primera vez, desde hace más de tres décadas, tuvo lugar una conversación telefónica entre los presidentes de EEUU e Irán. El secretario de Estado, John Kerry, declaró que se podría llegar a un acuerdo respecto al "dossier nuclear" iraní en un plazo de tres a seis meses:
–Estamos viendo que los norteamericanos han pensado en repetir la jugada que una vez hiciera Henry Kissinger con China, en el año 1972: convertir a Irán en su aliado. Irán fue aliado de Norteamérica hasta el año 1979, antes de los hechos conocidos, aunque esto ahora parece imposible a la luz de la historia con rehenes y tras treinta años de enemistad. Sin embargo, esto no está tan claro.
La elección como presidente de Irán a Hasan Rouhaní demuestra que Teherán, con el endurecimiento de las sanciones económicas de fondo, se inclina a entablar relaciones con EEUU, señala Serguéi Serióguichev:
–Teherán apuesta por la compleja situación en la que se encuentra EEUU. Después de que Irán perdiese el estatus de aliado de Norteamérica en la región, Iraq se encuentra en una situación precaria. No queda claro qué sucederá con Siria.Barack Obama no quiere bombardear Siria, pero su propio lobby militar–industrial y los demócratas y republicanos belicosos lo están obligando a ello, además de la presión de Qatar y Arabia Saudí. Tanto Obama como los funcionarioscon sentido común de su Administración buscan un punto de apoyo y ahí es donde entra en escena Irán.
Según la opinión del experto, EEUU se ha tornado demasiado dependiente de las monarquías del golfo Pérsico las cuales, a pesar de sus enormes posibilidades financieras y la influencia de su grupo de presión en la política de EEUU, son extremadamente débiles en el plano político-militar.
Por otra parte, en Irán, cargada de sanciones económicas internacionales, se ve restringida en el desarrollo de la rama petrolera y sufre una tensión social que afecta también a su estatus internacional:
–Irán es una potencia regional por el hecho mismo de su existencia y quiere que los norteamericanos la reconozcan como tal. Sostendrá, en cualquier caso, las enormes concesiones, asumiendo, como socio de EEUU, la obligación de reconstruir, en principio de manera oculta y luego abiertamente, sus relaciones con Israel, calmar a sus activistas en el Líbano, congelar las actividades terroristas de los grupos proiraníes en la Franja de Gaza... Los iraníes comprenden perfectamente qué significa todo esto, pero se verían obligados a hacerlo.
Sin embargo, según la opinión del experto, el acercamiento entre EEUU e Irán podría ser interrumpido por opositores de este proceso, incluyendo a los actuales aliados en Siria. Esto pudiera llevarse a cabo en forma de provocaciones con relación a los expertos de la ONU o con un inminente ataque químico. En este caso, una muestra de fuerza por parte de EEUU, inevitablemente cerraría las puertas a un acercamiento con Irán.