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domingo, 5 de noviembre de 2017

Hacen el mayor descubrimiento arqueológico de las pirámides de Egipto: Revelan cámara oculta aun sin profanar.

Revelado el mayor secreto de la pirámide de Keops, ocultamiento de la élite y la gran mentira.

El día de ayer se informaba al mundo que había sido descubierta una nueva cámara en la mayor pirámide de Egipto, es decir, en la pirámide de Keops.

Esta cámara recién descubierta tiene unas medidas de 5 metros de largo, por un metro de ancho y 8 metros de alto; es decir, es una cavidad bastante amplia. Según informan las autoridades encargadas del estudio, esta cámara nunca ha sido abierta desde su construcción, lo que abre la puerta a la imaginación y a la especulación de qué podría haber ahí.

Es por eso que ya se habla del mayor descubrimiento arqueológico de la historia deEgipto. El revelar lo que podría haber oculto ahí desde la misma construcción de la pirámide podría revelar quienes son sus verdaderos constructores y confirmar, o desmentir, si una inteligencia extraterrestre estuvo detrás de su construcción.

La egiptología oficial insiste en que fue el faraón Keops el responsable de su construcción, pero la realidad es que hay estudios que refutan contundentemente esa afirmación, pues le dan una antigüedad de mínimo 12000 años, muy anterior al periodo faraónico en Egipto; es más, muy anterior a la misma cultura egipcia.

En lo particular, yo creo que esas pirámides, y la esfinge, son la creación de una civilización humana ya extinta; tal vez es la creación de los gigantes de los que habla la biblia; es decir, sería una construcción antediluviana. Esa podría ser la explicación de por qué se observa una muy marcada corrosión por agua en la base de la pirámide y la esfinge.

Pero también podría ser la creación de una humanidad ya extinta, es decir, de una especie humana ya desaparecida hace miles, sino, millones de años.


Yo creo que la actual humanidad, que muy recientemente ha hecho su aparición en la tierra, hablando en términos geológicos, ha sido la última de una serie de humanidades que han poblado este planeta. Y la anterior a la actual sería la responsable de la construcción de las pirámides.

A decir verdad, el hombre actual es la última especie animal en hacer su aparición sobre la tierra.

No olvidemos que según la ciencia oficial el humano actual apenas tiene a lo máximo 200000 años de antigüedad. Pero los vestigios más remotos de humanos tecnológicamente avanzados son de apenas 6 a 7 mil años cómo máximo. Entonces, ¿eso quiere decir que los humanos que la ciencia dice existen desde hace 200000 años en realidad no son humanos actuales? Yo diría que así es.

Esos humanos, físicamente iguales a los actuales, no eran intelectualmente iguales a los presentes, es por eso que permanecieron en el mismo estado de desarrollo por miles de años.

Por otro lado, si consideramos el relato del génesis, ahí se nos dice que el humano comenzó a desarrollar la ciencia y la técnica solo después de que los Nefilim les dieron el conocimiento científico. Es decir, ellos les revelaron secretos que el Creador no querría que obtuvieran en ese momento para que así aprendieran a depender sólo de Él y no creciera un sentimiento de soberbia en sus corazones.

En ese tiempo Dios designó a un grupo de seres no humanos a los que les dio la tarea de vigilar el desarrollo espiritual del hombre, pero ellos en cambio les enseñaron a controlar el fuego, a fundir metales, las matemáticas, a contactar con seres espirituales, la astrología, astronomía, la minería, la metalurgia, las artes ocultistas, místicas, etcétera; y fue a partir de ahí que el hombre comenzó a desarrollarse tecnológicamente, pero también a practicar ritos ocultistas.

Pero esos vigilantes no solo enseñaron conocimiento prohibido al humano, también se aparearon con sus mujeres, surgiendo de esa relación carnal lo que la biblia llama Nephilims o gigantes.

En aquel tiempo estos Nephilims o gigantes se volvieron en extremo malvados, pues no reconocían la autoridad divina; pero también se volvieron tan extremos en su maldad que comenzaron a devorar a los seres humanos y, además, al parecer eran muy longevos o casi inmortales. Lo que llevó a Dios a elaborar un plan para acabar con la maldad de los Nephilims y los humanos, pues a raíz del conocimiento revelado por los vigilantes, ellos, los humanos, también se volvieron malvados y se alejaron de Dios.

Entonces fue cuando el Creador mandó el diluvio universal para acabar con los humanos pervertidos, con los Nephilims , y con la misma naturaleza corrompida, pues recordar que la maldad de los Nephilims y vigilantes era tanta que dañaron la misma creación a través de ingeniería genética, es decir, corrompieron la naturaleza al mezclar especies diferentes, tal cómo hoy hace el ser humano.

Por lo tanto, tal vez los constructores de las pirámides fueron esos Nephilims, o los vigilantes, o los humanos de entonces, o todos juntos a la vez. Quizá los humanos fueron obligados a construir esas pirámides por los gigantes, y la corrosión que se observa en la base de la pirámide y la esfinge es el resultado del diluvio universal y la posterior anegación permanente de esa región.

¿Recuerdan el relato de la torre de babel? Pues es muy similar a lo que habría pasado en Gizeh o Guiza, es decir, construir una estructura tan grande que alcance el cielo, no literalmente, pero sí en un sentido espiritual. Es decir, la pirámide era un acumulador de energías astrales, espirituales, con la intensión de obtener el conocimiento prohibido, o divino en este caso. Es decir, la pirámide habría sido construida con el único objetivo de contactar con seres espirituales y de servir de acumulador de energías etéreas. No por nada su construcción obedece a un plano astral, es decir, a la constelación de Orión.

No sé si lo he dicho en alguna oportunidad, pero cada astro, es decir, cada cuerpo celeste, tiene su propio espíritu, su propia “consciencia” por decirlo de alguna manera; así que al hacer una construcción pétrea al honor de cierto astro en realidad se está haciendo al honor de esa consciencia astral. De ahí viene la base de la práctica astrológica, práctica que está prohibida por Dios pues no es correcto querer poner en el lugar del Creador a otro ser; no olvidemos que ellos son criaturas de Dios como nosotros, pero no son dioses ni se comparan a ÉL; nunca podrá ser superior la creación al Creador.

Tal vez la pirámide de Keops es en realidad la misma Babel. Pues ante todo, la pirámide es un templo antes que otra cosa.

Yo sé que a muchos de ustedes no les gusta que hable de temas de religión o de vida extraterrestre, pero es que sin ninguna duda los egipcios no fueron los verdaderos constructores de las pirámides; ellas ya estaban ahí desde hacía milenios cuando apareció la cultura egipcia del Nilo, es decir, del periodo faraónico. Antes de esa época solo había tribus más o menos nómadas pero no había en la zona una cultura civilizada como tal.

Inclusive hay documentos que hablan de cuando el faraón Keops encontró las pirámides e hizo esculpir inscripciones egipcias en las mismas, y su mismo nombre. Él lo único que hizo fue construir templos y otras estructuras menores, pero no las pirámides ni la esfinge.

Así que, este descubrimiento sin duda marcará un antes y un después en la egiptología; claro, falta por ver si realmente permitirán acceder a esas cámaras recién descubiertas, pues no olvidemos que todo lo relacionado con el antiguo Egipto es estrictamente controlado, nada se permite explorar sin no está de acuerdo con la postura oficial de la ciencia y de las autoridades egipcias. Ellos, por supuesto, no permitirán que se derrumbe todo el dogma oficial que asegura que fue el faraón Keops el constructor original y que es una creación del antiguo Egipto y no de una civilización diferente ya extinta y de la cual no se conoce nada, a excepción de las mismas pirámides y los relatos en la biblia y en las tablillas sumerias.

Algunos me dirán que los constructores son los atlantes, los lemurianos, los hiperbóreos, etcétera; pero esas supuestas civilizaciones están más dentro del mito que de la realidad, pues no hay nada que avale su existencia a no ser de los relatos de Platón, relatos que obtuvo supuestamente de los sacerdotes egipcios. Además, algunos dicen que esos relatos de Platón eran más una fábula que un hecho real, es decir, que no fueron transmitidos por los sacerdotes egipcios, sino que más bien, son una invención del mismo Platón. Pero lo que sí es real son los relatos de las tablillas sumerias, relatos que tienen como mínimo 5000 años de antigüedad.

Concluyendo; yo espero que se permita la exploración de esa nueva galería descubierta, y espero que en caso de que así sea, no se oculte nada; aunque claro, dudo mucho que así suceda.

Recordemos que no solo se ha descubierto esa sala en el interior de la pirámide; también se sabe a ciencia cierta que debajo de la Esfinge hay recintos aun sin explorar, al menos no de manera oficial; y eso se sabe desde hace décadas, sin embargo, no han permitido su exploración por los fuertes intereses creados alrededor de la egiptología y del mismo gobierno egipcio que no permitirá que se derrumbe todo su cuento acerca de los constructores del valle de Gizeh. Para los egipcios eso es un orgullo y derrumbar ese mito sería un duro golpe a su orgullo nacional.

Inclusive, es casi seguro que existe una segunda esfinge solo que hoy está oculta en las arenas del desierto. Esta segunda esfinge se encuentra al lado de la primera, a solo unas decenas de metros. Y las autoridades egipcias saben que existe pero no la desentierran por temor a lo que puedan encontrar ahí.

También las elites no quieren que se descubra la verdad, desean continuar con los mitos y dogmas creados alrededor de la religión y de la cultura occidental; así mismo, tal vez no desean que se conozca su mismo origen, pues recordemos que los faraones aparentemente no eran humanos normales, pues tenían un enorme cráneo alargado tal como la iglesia católica hace ver a sus papas a día de hoy, colocando un enorme gorro en sus cabezas que simula el cráneo de los faraones. Por eso no es casualidad que el obelisco en Roma, en el Vaticano, sea un obelisco original traído desde Egipto, más bien, robado a Egipto; y lo ponen en medio de la plaza de san Pedro, frente a la basílica del mismo nombre. Claramente es un culto solar, un culto a la cultura egipcia antigua.

También esa es la misma razón del obelisco en Washington, pues también es un obelisco egipcio que cumple la misma función que el obelisco en el vaticano.

Así que, tal vez la elite no quiere que se sepa su mismo origen, origen que estaría en el mismo Egipto antiguo y, por lo tanto, serían descendientes de esos faraones egipcios que no eran del todo humanos. ¿Tal vez descendientes de los Nephilims?.

Hace poco se desenterró una estatua antigua de un faraón egipcio, se supone que es el mismo Keops, o quizá Akenatón. Akenatón fue el faraón que introdujo el monoteísmo en Egipto y que fue asesinado por eso mismo, pues retiró el culto a los dioses antiguos egipcios e introdujo el culto a un solo dios, al dios solar. Este Akenatón trasladó la capital egipcia a Amarna, lugar donde fundó otra ciudad. También se supone que Akenatón es el faraón del éxodo. Pero lo interesante de la estatua recién descubierta es que también posee el mismo cráneo alargado de todos los faraones antiguos.

La ciencia oficial dice que el cráneo alargado de los faraones no es en realidad su cráneo sino un gorro que se ponían en la cabeza para simular un cráneo alargado, pero la realidad es que era su mismo cráneo, pues no se ven rastros de ningún objeto o prenda sobre su cabeza, más bien, se aprecia claramente que es su mismo cráneo.

Inclusive se han desenterrado momias egipcias que poseen esa misma forma de la cabeza, alargada y enorme, lo que quiere decir que poseían un cerebro más grande de lo normal, más grande que el del ser humano común.

Y no es una deformación como muchos dicen, pues por más que se deforme el cráneo este siempre conserva el mismo volumen; pero en el caso de las momias recién descubiertas, y de las estatuas, la masa craneal es considerablemente mayor a la normal, lo que quiere decir que sus cerebros eran más grandes que los del humano corriente.

Quizá ese es el secreto que desean ocultar las élites y por lo que no permiten la exploración de la meseta de Gizeh: para que no sea descubierta toda la verdad y se descubra que los faraones no eran humanos normales, que los egipcios no crearon esas pirámides, y que ellos, la élite, descienden de esos seres antiguos que gobernaron el antiguo Egipto y que son a su vez descendientes de los antiguos gobernantes del valle del Éufrates y del Tigris, es decir, de los reyes de la antigua sumeria, cuna de la civilización moderna, incluyendo la egipcia; reyes que serían descendientes directos de los dioses sumerios, es decir, de los Nephilim y de los gigantes.

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