Al final de su cumbre anual, los 134 países miembros del G-77 y China enfatizaron el jueves, en una declaración ministerial, la necesidad de fortalecer el multilateralismo.
En esta misma línea, los cancilleres del citado grupo más China expresaron su apoyo al acuerdo nuclear con Irán, al que consideraron un ejemplo exitoso del uso de la diplomacia y el multilateralismo para solucionar los importantes problemas del mundo.
Los participantes demandaron también que se levanten las sanciones unilaterales contra la República Islámica, advirtiendo que las restricciones afectan, más que todo, al desarrollo y el bienestar de los iraníes.
En la cita, los cancilleres de China y el G-77, compuesto por 134 países en vías de desarrollo, discutieron las cuestiones que más acucian al mundo, incluidas la situación económica de los países subdesarrollados y la pandemia.
La Administración estadounidense, presidida por Donald Trump, abandonó hace dos años el acuerdo nuclear firmado con Irán en 2015, alcanzado por su predecesor, Barack Obama, y desde entonces ha restablecido duras sanciones económicas, diseñadas para obligar a Teherán a firmar un pacto más intrusivo.
Aunque la Casa Blanca afirma que los embargos no afectan a las “exenciones a los bienes humanitarios”, las autoridades iraníes aseveran que las restricciones han congelado efectivamente el acceso de Irán a los canales que emplea para importar alimentos y medicinas, en un momento en el que el país lucha contra el letal virus.
La República Islámica ha denunciado una y otra vez el impacto negativo del “terrorismo económico y médico” de Washington y lo define como “crimen de lesa humanidad”, pero asegura que no podrán doblegar a la nación persa.
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