El 10 de junio, el régimen israelí detuvo a Yaqub Abu al-Qian, un expolítico israelí y actual multimillonario, acusado por entregar información a funcionarios de la inteligencia iraní recientemente.
Además, el servicio de seguridad interna israelí (Shin Bet) afirmó el lunes que el empresario planeaba reunirse con los agentes iraníes.
Abu al-Qian ha tenido estrechos vínculos con varias personalidades de alto perfil israelíes durante los últimos 30 años, desde el ministro de asuntos militares de ese régimen, Moshe Yaalon, hasta el actual Benny Gantz, además de los parlamentarios y otros ministros de gabinete del régimen.
Según las autoridades israelíes, el magnate de la construcción proporcionó información a la inteligencia iraní a través de un intermediario con sede en El Líbano sobre los movimientos del ministro de asuntos militares israelíes, Benny Gantz, acuerdos militares de Israel, incluido sus contratos militares con Estados Unidos.
“Como parte de estos contactos, Abu al-Qian proporcionó actualizaciones de lo que estaba sucediendo” en los territorios ocupados, anunció Shin Bet.
La revelación del caso de Abu al-Qian, quien ha sido el patrocinador financiero de influyentes partidos israelíes durante muchos años y ha desempeñado un rol fundamental en ecuaciones políticas de alto nivel de Israel muestra que las operaciones de inteligencia de Irán contra el régimen israelí han tenido éxito.
En 2019, Gonen Segev, exministro de energía e infraestructuras del régimen de Israel, fue sentenciado a 11 años de prisión por “espionaje grave” y “transferencia de información” a Irán.
El servicio de seguridad interna israelí admite que la investigación actual es parte de su agenda en los últimos años frente a las actividades de inteligencia de Irán y el Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá) dentro de la estructura israelí.
Estas declaraciones revelan esta realidad, que Israel ha estado bajo la influencia de los agentes de inteligencia iraníes durante muchos años y se ha visto obligado a lanzar operaciones a gran escala y a largo plazo para depurar sus instituciones, y los casos divulgados son solo una parte de las confesiones indirectas que hacen las autoridades israelíes de estas actividades.
El 19 de diciembre de 2018, el director general de contraespionaje del Ministerio de Inteligencia de Irán afirmó que el exprimer ministro israelí Benjamín Netanyahu había “estado bajo una intensa presión interna y externa debido a las revelaciones de un ministro israelí (en alusión a Gonen Segev) que espiaba para Irán, así como a la filtración a gran escala de la que han sido objeto los servicios de inteligencia del régimen sionista por parte de la República Islámica”.
Ante estos hechos, Netanyahu ordenó entonces al Shin Bet indagar a todos los funcionarios, políticos, parlamentarios y agentes de inteligencia a fin de averiguar quiénes pudieran haber estado en contacto con los servicios de Inteligencia de Irán, resaltó el titular persa de Inteligencia.
https://www.hispantv.com/noticias/politica/495976/inteligencia-iran-israeli-espiar
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