Según informaron los medios locales, el primer ministro de Rusia, Mijail Mishustin, aprobó el miércoles un borrador de acuerdo sobre el establecimiento de una base marítima en Sudán y envió el proyecto al presidente del país, Vladimir Putin, a raíz de un acuerdo bilateral entre Moscú y Jartum.
Este documento hace hincapié en que la instalación logística de la Armada rusa “satisface los objetivos de mantener la paz y la estabilidad en la región, es de carácter defensivo y no está destinada contra ningún otro país", según recogió la agencia rusa de noticias TASS.
La citada base, según indican los detalles del citado proyecto, se usa para llevar a cabo reparaciones o tareas de abastecimiento y para paradas técnicas de los buques rusos. Además, el número del personal en esta base no excederá los 300 militares.
El texto señala también que la base puede albergar un máximo de cuatro buques de guerra, incluidos aquellos “con propulsión nuclear”, con la condición de que “se respeten las normas nucleares y de seguridad ambiental”.
En 2017, el depuesto presidente de Sudán Omar al Bashir informó a los medios que había debatido con su homólogo ruso el establecimiento de una base militar de Rusia en las costas del país en el mar Rojo, ubicado en una de las principales rutas comerciales del mundo.
Al-Bashir, en realidad, buscaba en aquel entonces la protección de Rusia frente a lo que definía como “los actos agresivos de Estados Unidos”, que, a su parecer, dividen su país en cinco entidades diferentes.
En los últimos dos años, Rusia ha enviado tropas a varios países africanos y está cerrando acuerdos militares con decenas de Estados, movimientos todos ellos que ponen de relieve su regreso al continente africano, rico en minerales y recursos naturales, como gas y petróleo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario