Los miembros de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) han enviado su mayor contingente de buques de guerra en dirección al mar Negro, específicamente a la costa de Crimea, y al Mediterráneo oriental, con destino a la base naval de Rusia en la ciudad siria de Tartus, ha informado este domingo el portal web ruso de aviación Avia.Pro.
Un reporte de la cadena británica BBC indica que ocho cazas furtivos F35B, de la Real Fuerza Aérea del Reino Unido, y 10 aviones furtivos, de la Infantería de Marina de Estados Unidos, se dirigieron a dichas zonas, y en Asia estarán acompañados por seis barcos, un submarino, 14 helicópteros navales y una compañía de la Marina Real.
Al menos dos buques de guerra de la Armada británica se moverán hacia Crimea y el resto se dirigirá al Mediterráneo oriental. Asimismo, se prevé que los británicos intenten usar sus cazas F-35 cerca de las bases rusas en Siria, es decir la aérea de Hmeimim, y la naval de Tartus.
Las relaciones entre Moscú y Kiev se han ido deteriorando, en particular, desde que la península de Crimea se reincorporó a Rusia tras un referéndum en marzo de 2014. Más del 96 % de los crimeos votó a favor de la incorporación a la Federación Rusa.
Las tiranteces entre Moscú y el Occidente se han incrementado en las últimas semanas, especialmente después de que Ucrania envió varias tropas bajo el paraguas de la OTAN, cerca del flanco occidental de Rusia.
El país euroasiático denuncia que dichas acciones son inaceptables, pues son unas medidas provocativas por parte del Occidente que socavan la estabilidad y la seguridad de las líneas limítrofes rusas.
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