El comandante en jefe del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica de Irán, el general de división Hosein Salami, ha dicho, la noche de este miércoles (hora local), que el sistema de seguridad nacional del régimen de Israel es más frágil que nunca.
“Los israelíes están sufriendo un colapso”, ha agregado el general Salami en su intervención en un programa en la televisión nacional, en el que ha detallado que el régimen de Tel Aviv atraviesa actualmente una grave crisis política, económica y de seguridad.
De igual modo, ha enumerado una serie de acontecimientos recientes que han desvelado la debilidad y las vulnerabilidades de Israel. Estos incluyeron, según el general Salami, una serie de ataques cibernéticos que afectaron a decenas de empresas israelíes y que comenzaron a finales del año pasado: la ejecución de espías israelíes en la ciudad de Erbil, en el norte de Irak, en enero; explosiones que sacudieron la ciudad portuaria israelí de Haifa en febrero; la explosión en la fábrica de misiles del mes pasado en un emplazamiento de misiles; y el aterrizaje de un misil antiaéreo sirio cerca del reactor nuclear de Dimona, situado en el desierto del Néguev; así como un incendio reciente que estalló en el Aeropuerto Internacional Ben Gurion.
Israel, ha proseguido, tiene muchos puntos débiles, entre los que se encuentra su comercio marítimo. “La navegación y el comercio marítimo del régimen sionista en todo el planeta sufren vulnerabilidades muy graves, a pesar de que el 90 por ciento del comercio israelí se realiza por vía marítima y este carece de cualquier frontera terrestre”, ha aseverado.
Las rutas marítimas que suele utilizar Israel para el comercio, ha agregado, “pueden interrumpirse fácilmente”, y ha detallado que el tamaño relativamente pequeño de los territorios ocupados israelíes los hace susceptibles a un golpe devastador.
“Su mayor debilidad es que cualquier acción táctica podría traerle una derrota estratégica”, ha dicho el general Salami, “lo que significa que una sola operación puede arruinar este régimen”, ha resaltado.
El máximo titular del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica ha dejado en claro que las autoridades israelíes deberían admitir esa realidad y “vigilar su comportamiento” con Irán.
Las autoridades iraníes han subido el tono en sus comentarios contra Israel en los últimos meses después del reciente acto de sabotaje en la planta nuclear de Natanz (centro de Irán) y un ataque a un petrolero iraní en el mar Rojo, en los que se ve la mano negra del régimen israelí.
En esta misma línea, el jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Irán, el general de división Mohamad Baqeri, avisó a finales de abril que la República Islámica no se quedará de brazos cruzados si continúan los aventurismos militares de dicho régimen. “Si siguen las acciones de Israel [contra el país persa], no sabemos cuál será la respuesta de Irán, pero el régimen sionista no vivirá en paz”, alertó.
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