“Las fuerzas estadounidenses gastaron enormes sumas de dinero en las operaciones de ampliación de los edificios de la base aérea de Ain Al-Asad”, ha revelado este lunes una fuente de seguridad iraquí a la agencia de noticias local Al-Maalomah, bajo condición de anonimato.
Según la fuente, este proyecto incluyó la construcción de nuevos edificios, así como la ampliación y anexión de otras áreas a la base militar norteamericana, situada en la provincia de Al-Anbar, en el oeste de Irak.
Además, ha detallado cómo las fuerzas estadounidenses construyeron decenas de nuevos pasillos y edificios dentro de instalación, hasta un nuevo sistema de defensa antimisiles para garantizar la seguridad de la base ante posibles ataques con drones y con misiles.
“Las operaciones de expansión continúan, a pesar del anuncio de la inminente retirada de las fuerzas estadounidenses de Irak”, ha denunciado.
De acuerdo con la fuente, el desarrollo de los edificios existentes en Ain Al-Asad no se lleva a cabo bajo la supervisión de los comandantes de seguridad de la provincia de Al-Anbar, porque la presencia de fuerzas estadounidenses en la base está relacionada con la oficina del primer ministro iraquí, Mustafa al-Kazemi, quien también es comandante en jefe de las Fuerzas Armadas del país árabe.
Esto mientras la indignación popular en Irak crece por la prolongada presencia militar de EEUU, país que, según revelan informes, está involucrado en distintos actos desestabilizadores en el territorio iraquí, incluido el apoyo a los terroristas, así como los ataques contra las posiciones de las fuerzas populares iraquíes que luchan contra el terrorismo.
El Gobierno de EE.UU. y el de Irak llegaron a un acuerdo en julio, mediante el cual el país norteamericano pondría fin a su “misión de combate” en Irak a finales de año, sin embargo, todos los soldados estadounidenses no volverán a casa.
Entretanto, las fuerzas iraquíes han advertido que una de sus prioridades es la expulsión de las tropas ocupantes y, si las fuerzas norteamericanas no se marchan, “atacarán los intereses” de EE.UU. en Irak.
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