Horas cruciales para Rusia: intento de golpe de estado encabezado por líder del grupo Wagner
Así es, el líder y jefe de los mercenarios de la empresa militar privada rusa, el grupo Wagner, ha iniciado un motín en contra del gobierno ruso y en contra de los mandos militares de la federación rusa.
Muchos de ustedes recordarán que Evgueni Prigozhin fue un elemento clave en varias batallas decisivas en ucrania, pues sus fuerzas, los soldados del grupo Wagner, liberaron la ciudad de Soledar y Artiómovsk (también llamada Bajmut) de las garras de las fuerzas armadas ucranianas y de los mercenarios extranjeros, así como de oficiales de la misma OTAN disfrazados de mercenarios.
Asimismo, el grupo Wagner fue también pieza clave en la liberación de la ciudad costera de Mariupol justo al inicio de la operación militar rusa en ucrania para liberar los territorios bajo agresión constante por parte de las fuerzas armadas ucranianas y los grupos paramilitares ucranianos de ideología neonazi, es decir, en la liberación de las repúblicas del Dombás y las regiones de Zaporozhie y Jersón.
Sin embargo, para nadie era un secreto que el líder de los Wagner tenía serias diferencias con los mandos militares rusos, pues supuestamente le negaban el suministro de municiones y armas para poder realizar de manera eficiente su trabajo, es decir, el combate de las fuerzas ucranianas y los mercenarios extranjeros que luchaban del lado de los ucranianos.
No obstante, si bien había dudas acerca de la veracidad de las palabras de Prigozhin, resulta que ahora se ha embarcado en una rebelión contra el mismo gobierno ruso y contra las fuerzas armadas del país, ante lo cual surge la pregunta: ¿En verdad era cierto que el grupo Wagner estaba muy limitado en cuanto a municiones y armas?, ¿Entonces cómo es posible que de repente resulten tener bastante munición y armas como para organizar una rebelión armada contra el gobierno y militares rusos?
Esta situación se hará completamente evidente después de unos días, sino que, de horas, y se verá que la rebelión encabezada por el líder de los Wagner no es más que una farsa y que en realidad este sujeto, Evgueni Prigozhin, no es más que un agente al servicio de poderes extranjeros; poderes extranjeros que son precisamente los que están llevando a cabo la guerra en ucrania contra Rusia.
Se entiende que las acciones que está realizando el jefe de los Wagner son todo menos un favor para los rusos, pues ahora es cuando más se necesita de la unidad en Rusia y entre sus ciudadanos, así como entre sus fuerzas armadas y sus servicios internos de seguridad, situación que Prigozhin está tratando de dinamitar para de esa manera destruir al mismo gobierno ruso, a la unidad nacional, y posiblemente, a la misma federación rusa. Él dirá que lo que está haciendo es revelar una supuesta situación desastrosa en cuanto a la operación militar que están realizando actualmente las fuerzas armadas rusas en ucrania, denunciando la muerte de hasta mil soldados rusos por día en combates con las fuerzas ucranianas y los mercenarios extranjeros. Sin embargo, suponiendo que así fuera; ¿Acaso lo que está haciendo Prigozhin es mejor, haciendo pelear a los rusos contra los mismos rusos? esas acciones solo benefician a alguien, y ese alguien no es otro más que los mismos gobiernos occidentales y aun el mismo gobierno ucraniano, pero a nadie más beneficia esta situación, y mucho menos a los rusos.
De tal forma que en el caso remoto de que Prigozhin estuviera realizando estas acciones como un supuesto favor en beneficio de los rusos, pues, según él, los está liberando de un mal gobierno y unos mandos militares ineptos y corruptos, en realidad lo que está haciendo es trabajar en favor de los intereses extranjeros, lo que se puede calificar perfectamente como de una alta traición en contra de la federación rusa, así como en contra de sus autoridades y, aun, contra el mismo pueblo ruso.
De este modo, si Prigozhin creía que obtendría el apoyo del pueblo ruso se equivocó rotundamente, y si en realidad no trabaja para los poderes extranjeros, indirectamente sí que lo está haciendo, y eso es inadmisible e imperdonable, por lo que puedo afirmar que esta rebelión encabezada por el jefe de los Wagner terminará en una contundente derrota para él y para sus seguidores, y, sobre todo, para los gobiernos extranjeros que están detrás de esta rebelión armada encabezada por Prigozhin.
Este sujeto, Prigozhin, se ganó la admiración y el respeto de muchos rusos y de muchos otros ciudadanos y lideres extranjeros, sin embargo, lo que ha hecho hoy borra por completo todas las buenas acciones, y todas las victorias que consiguió en el pasado para el ejército ruso, pues su traición no tiene nombre y es inadmisible; porque es precisamente en estos momentos cuando el pueblo ruso necesita estar más unido que nunca ante la presión y agresión de las potencias extranjeras; y esto que está haciendo Prigozhin solo puede calificarse de alta traición en favor de poderes foráneos, entiéndase, EEUU, Reino Unido, La Unión Europea y aun la misma OTAN.
Este intento por destruir a la federación rusa terminará en fracaso total, y los que la intentaron serán humillados y derrotados. Esta rebelión lejos de alcanzar su objetivo, solo hará más fuerte al gobierno ruso y a su ejército; y, asimismo, traerá más unidad al pueblo ruso que comprenderá que esta rebelión es un intento más de occidente por destruir a la federación rusa, por lo que los rebeldes no obtendrán el apoyo de nadie y serán derrotados rápidamente porque ni las fuerzas del orden, ni los soldados, ni ninguna autoridad rusa, los apoyará y los secundará; de tal modo que su camino solo es el camino de la ignominia y la humillación por trabajar para los intereses extranjeros, es decir, para los enemigos de Rusia.
Esto ya fue afirmado por el mismo presidente ruso Vladimir Putin, el mejor estadista hoy por hoy a nivel mundial; un presidente admirado y respetado por muchos, y temido por otros muchos más. Por eso intentan derrotarlo internamente, pero jamás lo conseguirán porque él representa al mundo libre y la alternativa al imperialismo anglosajón encabezado por EEUU y el Reino Unido.
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