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domingo, 18 de octubre de 2020

El avión de combate de sexta generación del Reino Unido aportará 25.000 millones de libras esterlinas y 20.000 puestos de trabajo a la economía británica, pero ¿puede permitírselo el país?

En sus últimos esfuerzos por conseguir apoyo para su programa de aviones de combate Tempest, la empresa de defensa británica BAE Systems afirmó que el proyecto generaría al menos 25.000 millones de libras y 20.000 puestos de trabajo para la economía del país.

Se espera que el ambicioso programa Tempest del país para desarrollar un nuevo avión de combate de sexta generación que reemplazará su flota de Eurofighter Typhoons complemente los aviones furtivos F-35 de origen estadounidense.

Según un informe de PwC, el programa Tempest también creará alrededor de 20.000 puestos de trabajo al año entre 2026 y 2050.

Los principales gigantes europeos de la defensa, BAE Systems, Leonardo, Rolls-Royce, MBDA, junto con la Oficina de Capacidades Rápidas de la Royal Air Force (RAF), así como una gran cantidad de pequeñas y medianas empresas y el mundo académico, forman juntos el Team Tempest.

El informe de PwC también afirma que el programa implicará la contratación directa de 100 empleados, con otros 270 empleados en todo el país.

El proyecto Tempest se concibió en el marco de la Estrategia Aérea de Combate del Reino Unido, que se lanzó en 2018 para establecer una visión audaz de la futura capacidad aérea de combate del Reino Unido. El objetivo es crear un futuro sistema aéreo de combate internacional liderado por el Reino Unido que será pionero en nuevas tecnologías, capaz de explotar y adelantarse a las amenazas en evolución.

Según BAE Systems, "Tempest se centra en ofrecer un sistema capaz, flexible y asequible para mediados de la década de 2030, proporcionando beneficios militares, económicos e industriales para el Reino Unido y nuestros socios internacionales".

"Solo Tempest continuará impulsando los beneficios de seguridad nacional y prosperidad del sector aéreo de combate del Reino Unido", afirma la compañía de defensa británica.



La pregunta es: ¿podrá el gobierno del Reino Unido continuar apoyando el programa incluso cuando una pandemia mortal ha puesto las finanzas del país bajo una enorme presión? Sin embargo, Team Tempest dice que el programa, de hecho, ayudará al país a salir de la crisis económica creada por la pandemia de Covid-19.

El problema es que la desaceleración de la economía británica inducida por la pandemia no es el único obstáculo para el tan codiciado proyecto. El limitado presupuesto de defensa reservado para Combat Air durante la próxima década deja poco margen para que el gobierno del país siga adelante con el programa.

Los analistas argumentan que completar Tempest requeriría una gran inyección de fondos fuera del presupuesto regular de defensa.

El 15 de octubre, Team Tempest dijo que se había logrado un progreso sin precedentes en el desarrollo de tecnologías de vanguardia para hacer que el jet de sexta generación cambiara las reglas del juego a largo plazo. El equipo afirmó que Leonardo, el líder en electrónica del programa, estaba desarrollando nuevos sistemas de radar capaces de proporcionar más de 10,000 veces más datos que los sistemas existentes.

El nuevo sensor, llamado 'Sistema de radiofrecuencia multifunción', recopilará y procesará cantidades sin precedentes de datos en el espacio de batalla, equivalente al tráfico de Internet de una gran ciudad como Edimburgo, cada segundo.

Este enorme volumen de información, procesada a bordo, le dará a Tempest una ventaja para ganar batallas en situaciones de combate, con la capacidad de localizar y apuntar a los enemigos mucho antes de que ellos mismos sean el objetivo.

Por separado, los ingenieros de BAE Systems han comenzado a probar en vuelo conceptos de vanguardia para las tecnologías de 'cabina portátil' de Tempest, diseñadas para proporcionar a los pilotos en la cabina oa los operadores en tierra una ventaja de una fracción de segundo.



El concepto ve los controles físicos que se ven en las cabinas de los aviones actuales reemplazados por pantallas de realidad virtual y aumentada proyectadas directamente dentro de la visera de un casco, que se pueden configurar instantáneamente para adaptarse a cualquier misión.

Según la declaración de Team Tempest, “también se están desarrollando conceptos que incluyen la formación de equipos de autonomía humana, donde un 'copiloto virtual' podría asumir algunas de las responsabilidades del piloto. El concepto de copiloto virtual aún se está desarrollando, pero podría, por ejemplo, tomar la forma de un 'avatar' integrado en la cabina para interactuar con el piloto ".

Uno de los miembros del Team Tempest, MBDA UK, también ha incorporado a uno de sus ingenieros de factores humanos dentro de este equipo de cabina portátil, lo que garantiza la introducción temprana de conceptos de armas que explotan estas tecnologías futuras.

“Este enfoque de asociación cercana entre MBDA UK y BAE Systems permitirá a las empresas ayudar a colaborar en una etapa temprana del programa, dando forma a cómo se optimiza la información y el funcionamiento de los sistemas de armas para el piloto”.

Rolls-Royce, por su parte, también ha desplegado a sus ingenieros en el desarrollo de tecnología avanzada de sistemas de combustión como parte del trabajo de potencia y propulsión de la compañía.



“El sistema de combustión es donde se introduce y quema el combustible para liberar energía en la corriente de gas. Un sistema de próxima generación deberá ser más caliente que cualquier plataforma anterior, lo que aumentará la eficiencia del motor y significará que puede ir más lejos, más rápido o producir menos dióxido de carbono.

Rolls-Royce ha estado explorando materiales compuestos avanzados y fabricación aditiva como parte de este trabajo, produciendo componentes livianos y más densos en potencia capaces de operar a estas temperaturas más altas ”, afirmó el fabricante de motores y miembro del Team Tempest, Rolls-Royce, en su declaración.

El equipo está trabajando en estos conceptos para desarrollar tecnologías que podrían usarse para crear un sistema aéreo de combate de próxima generación para el Reino Unido.

Según los informes, los socios individuales están trabajando para desarrollar más de 60 demostraciones de tecnología en los campos de detección, gestión de datos y autonomía para probar procesos y tecnologías innovadores en el programa.

Las empresas creen que el programa Tempest es esencial para la seguridad nacional y la prosperidad futura del país. Creen que el diseño de alto valor y las habilidades de ingeniería innovadoras necesarias para el éxito crearán una nueva generación de talento para impulsar la industria del Reino Unido.

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