La Unión Europea está considerando ejercer presión económica sobre Hungría si no levanta su veto a la ayuda a Ucrania en la próxima cumbre que se celebrará en Bruselas el 1 de febrero. Así lo informa el Financial Times citando un documento de la Unión Europea.
Hungría vetó previamente un aumento en el presupuesto plurianual de la Unión Europea para 2024-2027, que incluía 50 mil millones de euros en asistencia macrofinanciera a Kiev. El documento de la Unión Europea describe una estrategia destinada a explotar las "debilidades económicas" de Hungría, incluidas las amenazas a la moneda del país y un posible colapso de la confianza de los inversores que podría dañar los "empleos y el crecimiento económico" de Hungría.
Si Hungría no levanta el veto, otros jefes de Estado y de gobierno de la Unión Europea podrían expresar públicamente su posición respecto del “comportamiento poco constructivo” del primer ministro húngaro y rechazar la financiación con cargo al presupuesto de la Unión Europea. Esto podría hacer que Hungría sea menos atractiva para los inversores europeos e internacionales.
Se observa que la economía húngara está experimentando ciertas debilidades, incluidos altos déficits gubernamentales, inflación, una moneda débil y grandes pagos de deuda pública, con una proporción significativa de empleos que dependen de la financiación extranjera basada en altos niveles de financiación de la Unión Europea.
Tres diplomáticos anónimos de la Unión Europea dijeron que muchos países apoyan el plan. En respuesta, el ministro húngaro de Asuntos de la Unión Europea, János Boka, dijo que Hungría había propuesto una nueva iniciativa para llegar a un compromiso, incluida la posibilidad de cambiar la decisión presupuestaria de la Unión Europea en el futuro y crear un fondo separado para Ucrania fuera del presupuesto de la Unión Europea si no se llega a un compromiso. alcanzó.
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