La Flota del Norte de Rusia informó que aviones de la Real Fuerza Aérea británica (RAF, por sus siglas en inglés) interceptaron y escoltaron dos aviones de patrulla antisubmarina rusos Tu-142 que completaron exitosamente sus ejercicios militares, llevados a cabo este miércoles en la región del Atlántico nororiental.
“En diferentes etapas del vuelo, las aeronaves Tu-142 fueron escoltadas por cazas de las Fuerzas Aéreas noruega y británica”, agregó el portavoz de la Flota del Norte rusa, señalando que la vigilancia ocurrió pese a que la misión se había llevado a cabo en virtud de las normas internacionales sobre las aguas neutrales del mar de Barents, el mar de Noruega y el océano Atlántico.
Por su parte, un vocero de la RAF informó que aviones de combate británicos Typhoon interceptaron y escoltaron cuatro bombarderos rusos fuera del “área de interés de Reino Unido”, si bien, preciso que los cazas rusos no ingresaron en el espacio aéreo británico “en ningún momento”.
La Fuerza Aérea rusa realiza vuelos regulares sobre las aguas neutrales del Ártico, el océano Atlántico, el mar Negro y el Pacífico, en conformidad estricta con las normas internacionales del uso del espacio aéreo, sin violar las fronteras de otros Estados, de acuerdo con el Ministerio de Defensa ruso.
Incidentes de este tipo son frecuentes, también cerca de las fronteras de Rusia, cuya aviación intercepta a menudo aviones militares y espías tanto de EE.UU. como de los países miembros de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
El incidente del miércoles ha coincidido con las tensiones con el Occidente, bajo las afirmaciones de Estados Unidos y sus aliados de que Rusia se está preparando para “invadir” a su vecino.
Moscú tacha repetidamente las acusaciones de falsas e infundadas y explica que el desplazamiento masivo de fuerzas en su frontera cerca de Ucrania tiene como objetivo la disuasión ante el acumulamiento de fuerzas de la OTAN del otro lado de su territorio.
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