La Administración del presidente estadounidense, Joe Biden, restauró el viernes las exenciones de las sanciones a Irán para permitir proyectos de cooperación nuclear internacional, mientras las conversaciones indirectas entre estos dos países sobre la reactivación del pacto nuclear, de nombre oficial Plan Integral de Acción Conjunta (PIAC o JCPOA, por sus siglas en inglés) de 2015 entran en la recta final.
En este contexto, el Departamento de Estado estadounidense ha enviado un informe firmado por el secretario del Estado, Antony Blinken, al Congreso del país que explica que esta medida ayudará a los diálogos en curso en Viena (capital austriaca) entre Irán y el Grupo 4+1 (el Reino Unido, Francia, Rusia y China, más Alemania). Dichas exenciones fueron rescindidas por el gobierno del expresidente Donald Trump en 2019 y 2020, quien optó por retirarse del PIAC.
“La exención con respecto a estas actividades está diseñada para facilitar las discusiones que ayudarían a cerrar un trato sobre un retorno mutuo a la implementación total del JCPOA”, ha explicado el informe, tal y como recoge la agencia británica de noticias Reuters.
Los últimos diálogos en Viena fueron “entre las más intensas que hemos tenido hasta la fecha”, dijo el lunes un funcionario estadounidense a Reuters, bajo condición de anonimato. Ha habido algunos avances en la reducción de la lista de diferencias y que ahora es el momento de las decisiones políticas, agregó.
Otro alto funcionario del Departamento de Estado norteamericano, también bajo condición de anonimato, ha declarado que la exención era necesaria para permitir discusiones técnicas que fueron clave para las conversaciones sobre el regreso al acuerdo.
El funcionario estadounidense ha añadido que restablecer la exención no se debe considerarse como una señal de que Estados Unidos estuviera a punto de llegar a un entendimiento para volver al acuerdo.
Las conversaciones de Irán y el Grupo 4+1 para restaurar el acuerdo nuclear comenzaron a principios del año pasado y hasta el momento se han celebrado ocho rondas de diálogos entre ambas partes.
Las autoridades iraníes enfatizan que lo primordial en estas pláticas es el levantamiento efectivo de las sanciones y la normalización de las relaciones comerciales y económicas con el país persa, por lo que cualquier acuerdo debe cubrir estas demandas de Teherán.
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