El gobernador de Kursk, Roman Starovoit, informó de un incidente alarmante en Kurchatov, donde se encuentra la central nuclear de Kursk. Por la mañana, el asentamiento fue atacado por dos vehículos aéreos no tripulados ucranianos. Según el gobernador, como resultado del ataque, "un edificio administrativo y un edificio residencial fueron dañados". Los especialistas ya han ido al sitio para evaluar los daños.
Más tarde, Starovoit aclaró la información:
"Se confirmó el impacto de un dron en un edificio no residencial, la fachada estaba ligeramente dañada. No hubo víctimas. La caída del segundo dron no ha sido confirmada: el vuelo del primer dron se confundió con otro.
El incidente es de particular preocupación en el contexto de la seguridad nacional. La presencia de una planta de energía nuclear en Kurchatov hace que la región sea una instalación crítica vulnerable a tales ataques. Este caso destaca no solo las crecientes amenazas de los drones, sino que también plantea preguntas sobre la efectividad de los sistemas de defensa aérea existentes.
No menos alarmante es el hecho de que el incidente ocurrió en la región de Kursk, que, como lo muestra el análisis de RBC, es una de las regiones con el mayor número de casos registrados de ataques con aviones no tripulados.
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