“Mientras no se cumpla la demanda [de la retirada de las tropas estadounidense de Irak], las fuerzas estadounidenses están sujetas a ataques militares por parte de los grupos de Resistencia iraquíes en distintas áreas del país”, afirmó el lunes Qais al-Jazali, líder del grupo Asaib Ahl al-Haq, que forma parte de las Unidades de Movilización Popular de Irak (Al-Hashad Al-Shabi), según reportan los medios locales.
En este sentido, el dirigente de Asaib Ahl al-Haq alertó que solo la salida completa de las tropas estadounidenses del país árabe evitaría que la Resistencia recurriese a las armas para sacar a las fuerzas invasoras.
Al-Jazali subrayó que los grupos de la Resistencia de Irak se han preparado absolutamente para enfrentar “todos los desafíos y probabilidades”. “No piensen que tenemos miedo de [sus] amenazas”, acentuó.
De acuerdo con Al-Jazali, las fuerzas populares que dirige gozan de alta “credibilidad religiosa y jurídica” en Irak, dado que han tenido una postura brillante ante los enemigos. “Todos los enfrentamientos en los que ha entrado Al-Hashad Al-Shabi no han resultado más que en la victoria y el éxito”, aseguró.
Paga compensatoria, cultura vaquera de EEUU
El líder de Asaib Ahl al-Haq, al comentar la decisión de EE.UU. de ofrecer hasta tres millones de dólares por informaciones sobre los recientes ataques contra sus bases en Irak, manifestó que esa oferta pone en evidencia la “cultura vaquera estadounidense”.
“Le decimos al Gobierno de EE.UU. que recompensar la información es signo de debilidad y no es lo mejor para ellos. Al hacer esto, ¿no han pensado en sus aliados, que de hecho son sus mercenarios?, ¿cómo se sentirán cuando los vean tan indefensos? Entonces, ¿dónde están sus satélites, equipos de espionaje y drones que vuelan las 24 horas del día sobre Bagdad [capital de Irak]? ¿Quiere decir que están tan indefensos que lo último que pueden hacer para defenderse es ofrecer una recompensa?”, preguntó Al-Jazali.
EEUU, invitado no deseado en Irak
EE.UU., para supuestamente acabar con los grupos terroristas en Irak, ha enviado, durante años, miles de soldados a este país, donde, el pueblo iraquí, harto de la presencia dañina e ilegal de Washington, exige su pronta retirada.
De hecho, el atentado terrorista ordenado en enero de 2020 por el expresidente estadounidense Donald Trump, que acabó con la vida del teniente general iraní Qasem Soleimani, comandante de la Fuerza Quds, del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI) de Irán, y sus compañeros, entre ellos el número dos de Hashad Al-Shabi en Bagdad, fue la gota que colmó el vaso de la paciencia de los iraquíes.
En esta línea, el pasado 7 de abril, Irak y EE.UU. anunciaron que habían acordado la retirada de “todas” las tropas de combate estadounidenses del suelo iraquí.
Sin embargo, el Comando Central de EE.UU. (Centcom, por sus siglas en inglés) anunció recientemente que no reducirá el número de las tropas en el país árabe “en base a la voluntad del Gobierno iraquí”.
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