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miércoles, 22 de agosto de 2018

Boicot a EEUU: China se aprovecha de las compras de petróleo a Irán



China comienza a utilizar tanqueros iraníes para transportar el petróleo comprado a este país. El gigante asiático depende bastante de las importaciones del crudo iraní, pero podría incluso obtener beneficios económicos de una nueva ronda de sanciones estadounidenses contra la república islámica, opinan los expertos.

Por temor a las sanciones de EEUU, muchas empresas se niegan a prestar servicios para las transacciones con Irán. Por ejemplo, se volvió prácticamente imposible asegurar el suministro de petróleo desde Irán, puesto que la mayoría de las empresas que ofrecen productos de seguros se encuentran en la UE o EEUU.

Por eso China decidió transportar el crudo en buques iraníes. Los operadores de petróleo Zhuhai Zhenrong Corp y Sinopec Group aprovecharon una de las disposiciones del acuerdo de suministro a largo plazo con la National Iranian Oil Company (NIOC) que les permite utilizar petroleros iraníes en determinadas circunstancias. Ahora Irán cubrirá todos los costos y riesgos de la entrega de petróleo. Anteriormente, el país persa suministraba materias primas bajo condiciones FOB, es decir, las trasportaba hasta el petrolero y el comprador se encargaba de los costos y riesgos del transporte.

En realidad, esto no le permitirá a China eludir las sanciones porque EEUU amenaza con imponer restricciones a cualquier país que compre petróleo en Irán utilizando el sistema financiero estadounidense. A pesar de que China ya ha lanzado contratos petroleros de futuro en yuanes, la parte de transacciones en moneda china en el mercado mundial del crudo sigue siendo pequeña. Lo que significa que China también está bajo amenaza de las sanciones estadounidenses por comprar el petróleo iraní.

Por otro lado, en el contexto de la guerra comercial con EEUU, el peligro de las sanciones puede ser menos importante en comparación con la oportunidad de diversificar los proveedores de este valioso recurso energético. China es uno de los mayores consumidores de petróleo del mundo, incluyendo el petróleo de esquisto estadounidense, y podría utilizar el tema iraní para presionar a Estados Unidos, comentó a Sputnik el experto de la Universidad china del Sudoeste Ji Kaiyun.

"El petróleo iraní es muy importante para China, la complementariedad de los dos países en el campo de los recursos energéticos es alta. Pero Irán depende aún más de China, puesto que es difícil encontrar otro mercado similar para sus productos, mientras que China sí que puede comprar petróleo a otros países. Además, tanto China como Irán están ahora en confrontación con EEUU. Por lo tanto, no hay ninguna razón para que los dos países rechacen el apoyo mutuo", explicó el analista.

Hasta cierto punto, el comercio de petróleo entre China e Irán es un boicot a EEUU que viola las normas de la OMC. Aunque China busca cooperar con Estados Unidos y no quiere enfrentamientos, ¿qué tiene de malo si China ejerce presión sobre EEUU en respuesta a la presión estadounidense? También es elemento del juego de política exterior", añadió.

Ante la escalada de las contradicciones comerciales entre China y Estados Unidos, es muy importante que el país asiático mantenga el ritmo necesario de crecimiento económico, por lo que le conviene mucho comprar un petróleo barato.

Según Ji Kaiyun, "China siempre ha encontrado formas de importar petróleo iraní pese a las sanciones de EEUU. Y además lo ha comprado con descuento. Podrá inventar algo esta vez también".

Según el servicio aduanero de China, en 2017, el volumen total de las importaciones de petróleo al país aumentó en un 10,2% y alcanzó los 419,6 millones de toneladas. El año pasado, Irán ocupó el sexto puesto en el mercado chino entre los principales proveedores del crudo al país.

En mayo pasado, el presidente Donald Trump anunció que EEUU se retira del llamado Plan de Acción Integral Conjunto (PAIC) tras acusar a Irán de seguir desarrollando armas nucleares, y ordenó restablecer todas las sanciones suspendidas en el marco del acuerdo.

Algunas restricciones, en particular a la venta de dólares estadounidenses al gobierno de Irán, la adquisición de la deuda iraní y el comercio de oro y demás metales preciosos, se restablecieron al cabo de un plazo de 90 días, que venció el 6 de agosto.

Otras sanciones, en particular a la compra de petróleo y productos petroquímicos iraníes, así como a las operaciones con puertos y empresas marítimas iraníes y a las transacciones de instituciones financieras con el Banco Central de Irán, serán reinstauradas al cabo de un período de 180 días, que termina el 6 de noviembre próximo.

Los demás signatarios del plan que puso limitaciones al programa nuclear iraní reafirmaron su adhesión al acuerdo y coordinan los esfuerzos para salvaguardarlo.

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