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viernes, 24 de enero de 2014

¿Será realmente Evangélico????

Pronto en México podríamos tener partidos políticos evangélicos… un momento ¿qué?




Un grupo de evangélicos se perfila para constituir su propio partido político en nuestro país.

Según Reforma, la Agrupación Política Nacional Encuentro Social, vinculada con iglesias evangélicas, avanza en el procedimiento ante el IFE para convertirse en un partido político.

Así es, todos menos nosotros están constituyendo partidos político La televisión tiene el suyo, el yunque tiene el suyo, la familia del niño verde (Jorge Emilio González) tiene el suyo, y próximamente los evangélicos tendrán el suyo.

De acuerdo con el reporte del organismo electoral, hasta el momento, los evangélicos han reunido todos los requisitos -aún falta la fase final-.



En el 2003 Encuentro Social se había aliado con Convergencia, y en el 2006 firmó una alianza con Felipe Calderón durante su campaña presidencial.

Gracias a esa alianza, el dirigente de los evangélicos, el pastor Hugo Eric Flores, fue senador suplente del PAN y oficial mayor de la Semarnat.

Pero en el 2007 fue inhabilitado hasta el 2020 para ejercer cargos públicos, acusado de fraude en programas forestales. Este proceso aún está en litigio.

Sobre el partido, una cosa es que tenga ideas con tendencia religiosa, pero ¿no estaba prohibido que personas con cargos religiosos ocupen cargos de elección? Según nosotros, no sólo los católicos tiene jerarquías y líderes…para empezar el señor es pastor.



Encuentro Social recibió su registro como partido local (Pes) en Baja California el 30 de octubre del 2006, y en 2007 apoyó al candidato panista y hoy gobernador, José Guadalupe Osuna Millán.

En el 2009 PES buscó aliarse con el PRI y su dirigente trató de ser diputado federal.

Según el mismo partido, ellos tratan de preservar valores y principios morales a través del ejercicio de la política, y se ubica ideológicamente en el centro.

En sus estatutos se pronuncian por la observancia de los derechos humanos y ciudadanos:


«en un marco de respeto a la vida, la moral y la buenas costumbres»

Ahora, si nos atreviéramos a hacer un interpretación rápida de esta cita, podríamos preguntarnos ¿respeto a la vida? ¿no suena esto a una política anti aborto? ¿marco moral? ¿cuál de todas las morales? La moral es una jerarquización de ciertos valores y cambian de sociedad a sociedad, se supone que en una sociedad democrática no podríamos apelar a una moral determinada, sino a un ejercicio ético del poder que permita la cabida de la diversidad de creencias y prácticas. ¿Buenas costumbres?Nunca, en la historia de la humanidad, algo bueno ha provenido de alguien que dice que defiende algo así como las «buenas costumbres».

Aquí está el pastor.



Pero bueno, aunque la mayoría son evangélicos, su líder dice que el partido no lo es, y que incluirán a cualquiera de cualquier religión siempre que comparta su visión política.

No obstante, grupos de evangélicos admitieron que Flores intentó reunir adeptos para la realización de asambleas. De 200 distritales requeridas, en dicimebre Encuentro Social ya había superado las 180 asambleas.

Una vez que concluya enero, el IFE tendrá 6 meses para acreditar la legalidad y entregar el registro que les dará acceso a la prerrogativas.

Todos quieren su pedazo de pastel

Católicos no ven con malos ojos que grupos religiosos se metan a la política, pero quieren que lo puedan hacer todos.

La Arquidiósesis de México pidió a las autoridades electorales cumplir con la legislación antes de otorgar el registro para partido al grupo político de los evangélicos.

El vocero de la institución eclesial, Hugo Valdemar, afirmó que primero es necesario que constitucionalmente se les otorgue el derecho a los ministros de ser votados y posteriormente otorgar registro como partidos a estos grupos:


«No lo vemos mal, pero hay una legislación y hay que obedecerla, las autoridades tienen, por supuesto, la obligación de respetarla y si él (Eric Flores) tiene registro como ministro de culto no puede darse esta participación»

Aunque, aclaró que la religión católica no busca participar en la política, porque el propio derecho canónico lo prohíbe, pero el Estado no puede, según él, prohibírselos, pues es un asunto de derechos humanos, aunque, si somos justos, es un derecho que tenían hasta antes de rendir obediencia al Estado Vaticano y, si el laicismo parece limitante, es un recurso que tenemos para que los servidores públicos sirvan a toda la sociedad y no sólo con motivo de su fe y votos religiosos.

Por otro lado ¿para qué quieren un partido político? No les basta con el apoyo que ya tienen de parte de políticos, como el caso de ayer, en el que grupos religiosos desplegaron, con ayuda de un alcalde en Chiapas, propaganda en contra del matrimonio homosexual, el aborto y la marihuana.



Y el estado laico solamente le pregunta al IFE:


***Vía Reforma


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