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sábado, 6 de septiembre de 2014

UN NUEVO CAÍN AL QUE LLAMAN MCCAIN (por Carlos Rivero Collado*)


Aquí vemos al nuevo Caín reunido, el año pasado, con Abu Bakr al-Baghdadi, jefe del Estado Islámico, una de las tantas organizaciones terroristas creadas por el Imperio, que hoy amenaza con ocupar Bagdad y dominar a Iraq.


Este fanático ultra-guerrerista que anda por el mundo atizando la candela de lo que pudiera devenir en una conflagración nuclear, nació en la Zona del Canal de Panamá, ocupada entonces por el Imperio siempre ocupador, en agosto de 1936.
Después de vivir en la Zona y en otras bases navales, la familia se estableció en el norte de Virginia y el niño, ya joven, asistió a la Academia Naval de Annapolis, próxima a la capital del país.
Aunque su madre solía decir que John era muy inteligente, estrelló tres aviones mientras se entrenaba como piloto y, algún tiempo después, en 1958, ya con 22 años, se graduó en el lugar 894 de los 899 alumnos que ese año terminaron la academia. A pesar de eso, quizás por la influencia de su padre y abuelo que habían sido almirantes, fue ascendiendo en la escala naval hasta llegar a teniente-comandante.
En 1965, siendo un joven cuyo rostro lo asemejaba más a un galán de Hollywood que a un piloto de la Marina, se casó con una preciosa modelo de Filadelfia que se dedicaba a mostrar en las tiendas trajes de baño, llamada Carol Shepp, adoptando a sus dos hijos y teniendo entrambos una hija. Veremos después por qué esos tres niños, ya adultos, no le han vuelto a dirigir la palabra al nuevo Caín desde hace casi cuarenta años.


MC CAIN EN SUS TIEMPOS DE CRIMINAL DE GUERRA EN VIETNAM
Fue enviado, entonces, a Vietnam como piloto de guerra de los aviones A4 Skyhawk, asentados en el portaaviones USS Forrestal y, después del terrible accidente que destruyó éste, en julio del 67, y mató a 134 marinos, al portaaviones USS Oriskany. No está claro si el USS Forrestal cogió candela por casualidad o porque McCain estrelló en él un cuarto avión.
Antes de detallar los crímenes que este nuevo Caín perpetró en la Guerra de Vietnam, hagamos un poco de historia.
LA SUPREMA CUMBRE DEL HEROÍSMO
Sería muy prolijo abordar los anales milenarios del pueblo más heroico de la historia, notable vencedor del imperio más poderoso y cruel que haya tenido la humanidad.
Digamos sólo que al retirarse Japón de Indochina, en el verano de 1945, Ho Chi Minh, héroe de la resistencia nacional, proclamó la independencia de todo Vietnam.
Cuatro años antes, los aliados antifascistas habían firmado la Carta del Atlántico en la que proclamaban “la libre autodeterminación de los pueblos”, pero, después de la derrota de Japón, Gran Bretaña, que había ocupado el sur de Vietnam, se lo cedió a Francia, que lo había administrado, bajo el gobierno sometido al fascismo de Vichy, a nombre de Japón, de 1940 al 45.
Con el poderoso armamento de guerra que recibió de Estados Unidos, Francia trató de recuperar todo el país, pero tuvo que enfrentarse a la implacable resistencia del pueblo, dirigida por Ho y el general Vo Nguyen Giap.
El pueblo, unido bajo las banderas del Viet Minh y la jefatura de Ho y Giap, venció a Francia en la Batalla de Dien Bien Phu, en mayo de 1954. Se firmaron, entonces, los Acuerdos de Ginebra que pusieron fin a la guerra y a la ocupación colonial, pero antes de retirarse del sur, Francia, en complicidad directa con el gobierno de Estados Unidos, dejó en el poder, en Saigón, a Nguyen Dinh Diem, un teniente del ejército vietnamita sometido a Francia que había vivido en New Jersey protegido por la CIA, mientras Ho Chi Minh gobernaba, desde Hanoi, la mitad del país, la que está al norte del Paralelo 17.
La Declaración Final de los Acuerdos de Ginebra estipulaba que la reunificación de Vietnam debía ser decidida por el pueblo en las elecciones generales de 1956, a celebrarse en toda la península.
Conscientes de que más del 90% de los vietnamitas iba a votar por la reunificación bajo el mandato de Ho Chi Minh, el gobierno de Washington y su títere Diem violaron los Acuerdos de Ginebra y se negaron a celebrar elecciones al sur del Paralelo 17, o sea en Vietnam del Sur.
Eisenhower justificó su actitud de oponerse a Ho y Giap y apoyar al “demócrata” Diem, en la Doctrina Truman de “contención del socialismo”; pero esa “defensa de la democracia” era, en rigor, todo lo contrario, porque si el fundamento esencial de la democracia es la voluntad del pueblo y éste escoge el socialismo –como hizo más del 95% del pueblo cubano en el Referéndum de 1976 –incluyendo, para su honor, a quien esto escribe–, entonces el socialismo es la democracia y el anti-socialismo, la anti-democracia.
Aquella insolencia imperial encolerizó a todo el pueblo y, hacia 1957, se empezó a formar en el sur un movimiento revolucionario que, eventualmente, con el apoyo de los veteranos del Viet Minh, liberaría al país de sus verdugos. En esa larga guerra fueron asesinados más de dos millones de civiles inocentes y 56,000 soldados también fueron asesinados, aunque en forma indirecta, por el gobierno imperial de su propio país.
Pasaron unos años. Llegó Kennedy, que fue asesinado por agentes del Imperio que le cobraron su débil reticencia a participar en forma masiva en la guerra vietnamita, que es lo que querían los jefes del Complejo Militar-Industrial-Terrorista –CMIT– y llegó Lyndon Johnson, uno de los más grandes criminales de un imperio cuya historia está toda llena de crímenes.
Para que el pueblo de Estados Unidos aceptara la participación masiva de su país en Vietnam, Johnson y sus cómplices crearon una de las tantas auto-agresiones tan típicas del Imperio, entre ellas la más famosa: el Once de Septiembre.
De acuerdo al falso informe de Lyndon Johnson, tres lanchas torpederas de Vietnam del Norte habían atacado, en aguas internacionales próximas al Golfo de Tonkín, cercano a Vietnam, al destructor USS Maddox, el 2 de agosto de 1964, y dos días después, el propio Maddox y el también destructor C. Turner Joy habían mantenido un intercambio de guerra con otras naves vietnamitas.
Estos “viles ataques” provocaron la famosa Resolución del Golfo de Tonkín por la que el Congreso le dio poderes a Johnson para que comenzara a enviar a Vietnam cientos de miles de soldados. Unos años después, se probó que el Maddox no estaba en aguas internacionales sino muy cerca de las costas de Vietnam del Norte y que el segundo combate naval era falso. El propio Johnson lo reconoció en sus memorias.
Hacia 1968, ya había medio millón de soldados de Estados Unidos peleando en Vietnam. No hay espacio para detallar los terribles crímenes del imperio en la Guerra de Vietnam, ni siquiera los de My Lay y la Operación Phoenix.
Comenzaron entonces los masivos bombardeos contra Hanoi para asesinar civiles, o sea para aterrorizar al país, una práctica en la que el Imperio tiene una larga experiencia.
Es en este escenario de crimen supremo en que comienza la misión de John McCain.
CON BOMBAS DE MIL LIBRAS
¿Cuántos Abeles, o sea cuántos bebitos, cuántos niños, cuántas madres, cuántos ancianos, cuántos, en fin, civiles inocentes asesinó, en Vietnam, este Caín con su A-4 Skyhawk en las veintitrés misiones ultra-terroristas que realizó sobre Vietnam del Norte? ¿Sería aventurado decir que unos quinientos? ¿Miles, acaso? ¿Decenas de miles?
El A-4 Skyhawk es un avión de guerra que lleva dos cañones de veinte milímetros, cohetes Sidewinter, Shrike y Walleye y bombas de mil libras. Como es un avión para un solo pasajero, quien lo conduce es, a un tiempo, piloto, cohetero, ametrallador y bombardero… un Titán del Terrorismo.
Después de perpetrar veintidós bombardeos sobre varias ciudades de Vietnam del Norte, mientras realizaba su vigésimo tercer crimen, su Skyhawk fue impactado por fuego antiaéreo y logró lanzarse en paracaídas para caer, de noche, sobre el Lago Truc Bach, en Hanoi.
No se atacan de noche objetivos militares, sino familias en sus hogares. El único testimonio que existe sobre el derribo de McCain y todo lo que sucedió en los próximos cinco años y medio en que fue prisionero de guerra en la cárcel Hoa Lo de Hanoi, es el del propio McCain, “avalado” por dos soldados estadounidenses que dicen que estuvieron con él en la propia prisión. No hay nada más.
De acuerdo al testimonio posterior de este nuevo Caín y de esos dos soldados, que también fueron a Vietnam a matar vietnamitas, McCain sufrió graves heridas en los brazos y las piernas antes de lanzarse en paracaídas, luego fue atacado con bayonetas por varias personas cuando flotaba sobre el lago Truc Bach y, ya prisionero, fue llevado a una celda solitaria de Hoa Lo en la que permaneció varios meses sin ninguna atención médica, siendo salvajemente torturado después, durante varios años, por oficiales de Inteligencia vietnamitas y… cubanos.
Unos meses después de su encarcelamiento, McCain firmó una declaración en la que decía:
- “I’m a black criminal and I have performed the deeds of an air pirate. I almost died and the Vietnamese people and the doctors saved my life” (Soy un negro criminal que ha actuado como un pirata aéreo; estuve a punto de morir y el pueblo vietnamita y sus médicos me salvaron la vida).
Había en la declaración un racismo subyacente – tal vez por eso sea el más empecinado enemigo de Barack Obama – porque debió decir “soy un criminal rubio de ojos azules”. Para justificar esa cobardía, McCain lleva 40 años insistiendo en la misma cantilena: que tuvo que firmar esa declaración después de cuatro días de salvajes torturas.
Los cobardes suelen esconderse detrás de la mentira y las sombras. Lo hacen en la mayoría de estas tribunas cibernéticas, insultando detrás de ridículos seudónimos a quienes defienden sus ideas con sus nombres reales, a veces dentro de la trinchera enemiga.
EL CRIMINAL REINCIDENTE
Firmados los Acuerdos de Paz, en París, por Henry Kissinger y Le Duc Tho, el 27 de enero de 1973, McCain recobró su libertad, pero al regresar a su hogar, se llevó una sorpresa. Carol, la buena esposa que se le había mantenido fiel durante sus años de lejanía, guerra y cautiverio, no era ya la bella modelo de Filadelfia: dos años antes había sido desfigurada en un accidente. Su coche resbaló en la nieve y chocó, a alta velocidad, contra un poste de telégrafo. Su pelvis y un brazo fueron destrozados por el impacto y sufrió masivas heridas internas. Estuvo seis meses en un hospital y, para salvarle sus piernas, los cirujanos tuvieron que cortar secciones de los huesos destrozados. Al salir, quedó con sus piernas cuatro pulgadas más cortas de lo que habían sido.
Unos años después de su liberación, McCain fue puesto al frente de una academia de entrenamiento naval en la Florida. Se dedicó, entonces, al alcohol y las mujeres: era joven y bien parecido y su esposa… una buena mujer llena de cicatrices, en sillas de ruedas y envejecida antes de tiempo.
Entonces se divorció de Carol y… unos días después se casó con Cindy Lou Hensley. Él tenía 43 años, ella era una bella mujer de 25 años que, sobre todo, tenía una fortuna de cien millones de dólares.
Veamos, finalmente, lo que ha hecho este Caín en los años recientes.
1-. Criticó fuertemente a George W. Bush porque, según él, no había usado el suficiente poderío militar para invadir a Iraq en marzo del 2003. Tal vez pensó que iba a haber menos muertos que en Vietnam, o sea que no se iba a alcanzar la suficiente cuota de sangre que exige la poderosa industria de armamentos del Complejo Militar-Industrial-Terrorista para que se mantengan sus fabulosas ganancias.
2-. Nunca condenó el asqueante salvajismo de Abú Ghraib –hasta Bush lo hizo, con hipocresía por supuesto, porque fue su culpable principal–.
3-. Lleva siete años criticando a Obama porque no ha sido lo suficientemente enérgico –o sea imperialista– en Afganistán y ha propuesto que este país envíe a cientos de miles de soldados a Afganistán e Iraq para aplastar a ambos países, o sea para ocuparlos totalmente. Ha pedido que los bombardeos al norte de Pakistán sean mucho mayores que los que Obama ha ordenado mediante el uso de drones o aviones de guerra teledirigidos.
4-. Ha criticado fuertemente a Obama porque abandonó el profuso sistema de cohetes nucleares que se planeaba establecer en Polonia, que pudo provocar una guerra nuclear con Rusia.
5-. Ha dado a entender que invadirá Irán si ese país prosigue con su programa nuclear –que fue introducido por Estados Unidos, en 1950, durante el gobierno de Mossadegh y después el del Shah Reza Palhevi, como parte del Programa Átomos para la Paz. Ahora McCain considera el mismo programa como un “casus belli”, digno de desencadenar una guerra en el Medio Oriente mucho más terrible que las de Irak y Afganistán.
6-. Ha venido a Miami varias veces para criticar al gobierno por no haberle impuesto al pueblo cubano un bloqueo económico más estricto del que ya ha tenido por más de medio siglo.
7-. Se opuso al Plan de Estímulo Económico del 2009, impulsado por Obama, para favorecer a las clases más afectadas por la crisis económica del 2007 provocada por las prácticas ultra-capitalistas de Wall Street. Asimismo se opone al Obamacare. Como se sabe, Estados Unidos es el único país supuestamente civilizado en el que no existe un plan nacional de salud y decenas de millones de personas han carecido de atención médica y hospitalaria. De la misma forma se opone a la reforma migratoria, pero en esto no difiere mucho de Obama, a pesar de la falsa retórica del Presidente.
8-. Durante los inicios de la guerra contra el pueblo de Libia, a principios del 2011, visitó a los “rebeldes” de Bengazi, sometidos al Imperio y sus secuaces, y fue el dirigente yanqui que más presionó para que se perpetraran los masivos bombardeos en los que fueron asesinados decenas de miles de civiles no-combatientes, entre ellos los tres pequeños nietos del gobernante socialista Muamar Gadafi.
9-. Una prueba palpable de que el Imperio y el sionismo estan detrás de muchos de estos grupos terroristas creados en los ultimos años, es el apoyo total que le dieron a quienes despues frormaron el llamado Estado Islamico que hoy amenaza con ocupar Bagdad y dominar a Iraq. Y uno de los mas entusiastas aliados de esa hoy poderosa organización ha sido este nuevo Cain.
10-. Ha sido el dirigente imperial que más se ha solidarizado con los “combatientes” de Siria que han sembrado el terror en ese pais por mas de tres anos y que ahora se unen a los del Estado Islámico de Iraq.
11-. Participó, también directamente, en la primavera árabe que produjo la caída de Hosni Mubarak en Egipto y que es el origen de toda la peligrosa anarquía que hay hoy en ese país.
12-. Asimismo estuvo presente en Kiev cuando las turbas neonazis trataban de derrocar al presidente Yanukóvich mediante un sanguinario levantamiento en el que varios francotiradores, pagados por el Imperio y sus secuaces de la Unión Europea, asesinaron a varios manifestantes pacíficos para que se culpara al gobierno. Ha sido el dirigente yanqui que más ha apoyado a los dirigentes neonazis que surgieron de aquella revuelta y al actual presidente Piotr Poroshenko.
13-. El nuevo Caín es un aliado incondicional del sionismo y ha apoyado, con gran entusiasmo, las tres invasiones terroristas a Gaza en las que han sido asesinados miles de niños, mujeres y ancianos. Se cree que le ha propuesto al régimen de Benjamín Netanyahu que bombardee las bases de investigación nuclear de Irán, lo que pudiese provocar una guerra entre los dos países que pudiera convertirse en nuclear porque Pakistán apoyaría a Irán ante esa gravísima agresión, y Rusia, el primer poder nuclear del mundo con un 20% de bombas nucleares más que Estados Unidos, pudiera entrar en ese conflicto.
14-. El Partido Republicano sufre una crisis histórica de liderazgo en la que se ha dicho que hasta Marcos Rubio y Ted Cruz son presidenciables y, por ello, es posible que McCain sea su candidato en las elecciones nacionales de noviembre del año que viene, a pesar de que la semana pasada cumplió 78 años, o sea que si triunfara tomaría posesión con casi 80 años, lo que nunca ha sucedido en la historia de este país. Los probables candidatos del Partido Demócrata pudieran ser Hillary Clinton o el vice Joe Biden. El mejor, por supuesto, sería el sensible líder ecológico y exvice Al Gore, Premio Nobel de la Paz por su destacadísima labor en favor del futuro de la humanidad. Confío en que el pueblo estadounidense no se incline al suicidio y sepa elegir.
Es mucho más lo que se puede decir del nuevo Caín y lo diremos.


*Carlos Rivero Collado. La Habana, 1939. Estudió Ciencias Políticas en Columbia University, New York, y fue profesor de historia. Aunque salió de su país el día en que triunfó la Revolución (su padre era el Presidente-electo de Cuba que debía tomar posesión dos meses después), y combatió contra ella en Playa Girón, dio un viraje de 180 grados unos años después, se unió a la Revolución y regresó a Cuba. Durante más de 40 años se ha enfrentado al imperialismo, realizando una intensa labor en diversos medios de comunicación, incluyendo Internet. En 1976, se publicó en La Habana su obra “Los Sobrinos del Tío Sam” que tuvo amplia difusión en España y América Latina, siendo traducida a varios idiomas. Es, además, autor de las novelas “Chapultepec” y “Danilo” y tiene en preparación la obra histórica “Imperio del Terror” y la antibélica “Akira Okura”. Reside en Miami y aunque retirado de la enseñanza, sigue pujante en la batalla de las ideas, la reflexión constante y el esfuerzo cotidiano de la militancia por un mundo mejor.

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