Efecto Nibiru 2012: ¿Ya son visibles “dos soles” en el cielo?
La NASA informa de que esa luz sería Betelgeuse, que estalló hace 590
años. La otra explicación posible sería un fenómeno atmosférico llamado
parheli
ARGENTINA.- Desde hace un par de años, la red Internet da cuenta de fotos y filmaciones donde se puede apreciar al Astro Rey acompañado de “algo” que en ocasiones se muestra a la izquierda o a la derecha. Para el ojo inexperto a la sorpresa sigue la duda, ahora alimentaba por comentarios sobre anuncios apocalípticos.
ARGENTINA.- Desde hace un par de años, la red Internet da cuenta de fotos y filmaciones donde se puede apreciar al Astro Rey acompañado de “algo” que en ocasiones se muestra a la izquierda o a la derecha. Para el ojo inexperto a la sorpresa sigue la duda, ahora alimentaba por comentarios sobre anuncios apocalípticos.
La imaginación popular y la falta de información han hecho correr noticias de la más variada índole sobre estos supuestos
"dos soles". Para algunos, ese resplandor se compadece con las teorías Mayas que
preanuncian el fin del mundo, para los más ortodoxos es el anuncio
bíblico del “Tiempo de los tiempos”, y para los aficionados a la ciencia
ficción, es el retorno de Nibiru, la casa de los Annunakis, seres que en algún momento dejaron la vida sobre la Tierra.
Si se quiere, hay más incluso, estos seres serían una suerte de “depredadores del Universo” y cuando alcancen nuestro Planeta en los próximos meses, esclavizarían a los humanos y saquearían todas las reservas de metales preciosos.
Si la única palabra creíble en esta historia puede ser la de la NASA, hasta aquí, la Agencia nada ha admitido sobre cuerpos celestes de grandes dimensiones en viaje hacia la Tierra, abonando con este silencio sobre el asunto la imaginación de quienes comparten la teoría de la conspiración de que hay un silencio premeditado por parte de la NASA.
La NASA informa de que esa luz sería Betelgeuse, que estalló hace 590 años -una supernova- , cuya onda expansiva llegaría a la Tierra en algún momento antes de fines del 2012. Para algunos, esta explicación resulta insatisfactorio dado el brillo que en algunos casos puede tener este acompañante del Sol.
¿Un Parhelio?
La otra explicación posible sería un fenómeno atmosférico llamado parhelio, producto de la refracción de la luz solar y que no siempre se presenta con la misma forma. Suele presentarse cuando el sol está en el Cenit y hay Cirroestratos a su alrededor y son más visibles –justamente- en el amanecer y atardecer, la misma hora que dicen, se ve Nibiru.
En suma, tan cierto parece ser que ya es visible “algo” junto al Sol, como que ninguna explicación que afirme o niegue una presencia se ha escuchado. En el medio del espacio que dejan estas dos afirmaciones, el imaginario colectivo traza hasta la teoría más disparatada. (Redacción –
)
Si se quiere, hay más incluso, estos seres serían una suerte de “depredadores del Universo” y cuando alcancen nuestro Planeta en los próximos meses, esclavizarían a los humanos y saquearían todas las reservas de metales preciosos.
Si la única palabra creíble en esta historia puede ser la de la NASA, hasta aquí, la Agencia nada ha admitido sobre cuerpos celestes de grandes dimensiones en viaje hacia la Tierra, abonando con este silencio sobre el asunto la imaginación de quienes comparten la teoría de la conspiración de que hay un silencio premeditado por parte de la NASA.
La NASA informa de que esa luz sería Betelgeuse, que estalló hace 590 años -una supernova- , cuya onda expansiva llegaría a la Tierra en algún momento antes de fines del 2012. Para algunos, esta explicación resulta insatisfactorio dado el brillo que en algunos casos puede tener este acompañante del Sol.
¿Un Parhelio?
La otra explicación posible sería un fenómeno atmosférico llamado parhelio, producto de la refracción de la luz solar y que no siempre se presenta con la misma forma. Suele presentarse cuando el sol está en el Cenit y hay Cirroestratos a su alrededor y son más visibles –justamente- en el amanecer y atardecer, la misma hora que dicen, se ve Nibiru.
En suma, tan cierto parece ser que ya es visible “algo” junto al Sol, como que ninguna explicación que afirme o niegue una presencia se ha escuchado. En el medio del espacio que dejan estas dos afirmaciones, el imaginario colectivo traza hasta la teoría más disparatada. (Redacción –
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