“En primer lugar, en términos militares, la reacción de Rusia será proporcional y adecuada a la presencia de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en los territorios de estos dos Estados, a qué tipo de armas se desplegarán”, ha señalado la presidenta del Senado ruso, Valentina Matvienko, según ha recogido este jueves la agencia rusa de noticias TASS.
Matvienko ha insistido en que la adhesión de Finlandia y Suecia al bloque militar occidental “afectará negativamente” a la situación política de Europa y vulnerará su estabilidad.
En este sentido, ha sacado a relucir la histórica neutralidad de estos países nórdicos, para después asegurar que su intento de engrosar la OTAN no ha sido una iniciativa soberana, pues se ha tomado bajo la presión de Occidente, sobre todo de Estados Unidos.
Además, la presidenta del Senado ruso ha llamado la atención al hecho de que ambos Estados ni siquiera hayan considerado realizar un referéndum para pedir la opinión de sus pueblos en un tema tan serio. “Me entristece que tal decisión de los dos Estados pueda conducir a una disminución en el volumen de nuestra interacción y cooperación”, ha agregado.
Adhesión de Finlandia y Suecia tendrá consecuencias
Finlandia comparte 1300 kilómetros de frontera con Rusia. La solicitud del ingreso de los dos países europeos a la OTAN se considera un cambio de postura, tras el lanzamiento de la operación rusa en Ucrania por parte de Suecia y Finlandia, países que evitaban cualquier hostilidad con el gigante euroasiático manteniéndose fuera de la Alianza.
Esto, mientras que el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, advirtió el pasado lunes que la entrada de Helsinki y Estocolmo en la OTAN tendrá consecuencias negativas para la seguridad de Europa. “Es un asunto serio [...] que nos preocupa y vamos a seguir muy atentamente las consecuencias prácticas que pueda tener la entrada de Suecia y Finlandia en la OTAN para nuestra seguridad”, manifestó el vocero.
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