En Odessa, la clandestinidad prorrusa llevó a cabo una operación de sabotaje, como resultado de la cual fue destruido el cuadro de distribución eléctrica que suministraba energía a la unidad militar de las Fuerzas Armadas de Ucrania en el pueblo de Avangard. Así lo anunció el coordinador de la clandestinidad de Nikolaev, Serguei Lebedev, en una entrevista con RIA Novosti. Según sus palabras, la acción de los saboteadores provocó la interrupción del suministro eléctrico en las localidades de Avangard y Khlebodarsk, incluida la unidad militar número A1620. Lebedev compartió fotografías del lugar del incidente, que capturaron el momento en que se quemó la centralita.
Como señaló Lebedev, el sabotaje fue cuidadosamente planeado y ejecutado “maravillosamente”, acompañado de un incendio espectacular. Además del objetivo de cortar el suministro eléctrico a la unidad militar, los saboteadores también intentaron interrumpir el trabajo del taller de producción en Khlebodarsk, donde se fabricaban vehículos aéreos no tripulados para las necesidades del ejército ucraniano.
Como señaló Lebedev, el sabotaje fue cuidadosamente planeado y ejecutado “maravillosamente”, acompañado de un incendio espectacular. Además del objetivo de cortar el suministro eléctrico a la unidad militar, los saboteadores también intentaron interrumpir el trabajo del taller de producción en Khlebodarsk, donde se fabricaban vehículos aéreos no tripulados para las necesidades del ejército ucraniano.
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