Cazabombardero ruso Sujoi Su-24, lanza misiles.
Rusia se prepara para poner a prueba, en un futuro próximo, una bomba de alta precisión, en sus ataques aéreos contra los terroristas en Siria, según un informe.
El portal web israelí DEBKAfile, en un informe publicado este lunes, sobre la continuación de la campaña antiterrorista de Rusia en Siria, afirma que la bomba a probar es la KAB-250 perteneciente a la nueva generación de armas de la Fuerza Aérea rusa y diseñada para ser lanzada desde el depósito de fuselaje de los cazas de combate de quinta generación T-50 (PAK-FA).
La bomba rusa de alta precisión, que mide más de 3 metros de largo y 285 mm de diámetro y pesa 256 kg., se fabrica en dos versiones: una para ser guiada por satélite y la otra, por láser.
Además este aparato explosivo de última generación puede ajustarse a diferentes velocidades y trayectorias y tiene capacidad de soportar cualquier condición climática y funcionar en cualquier momento del día, de acuerdo con varios informes.
Bomba guiada de alta precisión KAB-250, de fabricación rusa.
La KAB-250, que puede portar una carga de 127 kilos de explosivo rompedor, tiene una ojiva de fragmentación diseñada para destruir material ligeramente vulnerable, vehículos sensibles y otras instalaciones enemigas. Además, esta bomba puede ser lanzada de forma individual o en salvas.
DEBKAfile, a continuación, apunta que la Aviación rusa utiliza actualmente una versión anterior a la KAB-250, es decir la KAB-500 PGM, para atacar las posiciones del grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe) en el territorio sirio.
El pasado 30 de septiembre, Rusia puso en marcha una serie de operaciones aéreas en Siria contra las posiciones de los grupos terroristas, atendiendo a una solicitud del presidente sirio, Bashar al-Asad.
A partir de entonces, los aviones militares rusos han realizado ataques contra más de 450 objetivos de Daesh; en paralelo, los buques de guerra rusos también han participado en las ofensivas: el 7 de octubre lanzaron misiles teledirigidos desde el mar Caspio contra posiciones de los terroristas en Siria.
Según ha informa este lunes el portavoz del Ministerio ruso de Defensa, Igor Konashenkov, recientes ataques aéreos de Rusia en Siria han obligado a los terroristas de Daesh a huir de sus posiciones en los alrededores de Damasco (capital).
La ofensiva rusa tiene preocupados al régimen de Israel y Estados Unidos, que la han criticado alegando que “Rusia no tendrá éxito”.
La KAB-250, que puede portar una carga de 127 kilos de explosivo rompedor, tiene una ojiva de fragmentación diseñada para destruir material ligeramente vulnerable, vehículos sensibles y otras instalaciones enemigas. Además, esta bomba puede ser lanzada de forma individual o en salvas.
DEBKAfile, a continuación, apunta que la Aviación rusa utiliza actualmente una versión anterior a la KAB-250, es decir la KAB-500 PGM, para atacar las posiciones del grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe) en el territorio sirio.
El pasado 30 de septiembre, Rusia puso en marcha una serie de operaciones aéreas en Siria contra las posiciones de los grupos terroristas, atendiendo a una solicitud del presidente sirio, Bashar al-Asad.
A partir de entonces, los aviones militares rusos han realizado ataques contra más de 450 objetivos de Daesh; en paralelo, los buques de guerra rusos también han participado en las ofensivas: el 7 de octubre lanzaron misiles teledirigidos desde el mar Caspio contra posiciones de los terroristas en Siria.
Según ha informa este lunes el portavoz del Ministerio ruso de Defensa, Igor Konashenkov, recientes ataques aéreos de Rusia en Siria han obligado a los terroristas de Daesh a huir de sus posiciones en los alrededores de Damasco (capital).
La ofensiva rusa tiene preocupados al régimen de Israel y Estados Unidos, que la han criticado alegando que “Rusia no tendrá éxito”.
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