"Hemos llegado a la conclusión, como lo haría cualquier observador racional, que es poco probable que las sanciones detengan la finalización del oleoducto (...) es por eso que esta administración determinó que no era de nuestro interés socavar significativamente, debilitar nuestra relación bilateral [con nuestro aliado Alemania] por un oleoducto, cuya construcción no obstante continuaría", dijo Price a periodistas.
Por su parte, la subsecretaria de Estado para Asuntos políticos, Victoria Nuland, dijo en un testimonio ante el Congreso que Alemania se comprometió para tomar medidas y presionar a la Unión Europea para que actúe si Rusia usa la energía como arma contra Ucrania.
"Entre otras cosas, Alemania se ha comprometido en este acuerdo con EEUU a que si Rusia intenta utilizar la energía como arma o comete más actos agresivos contra Ucrania, Alemania tomará medidas a nivel nacional y presionará para que se adopten medidas eficaces a nivel europeo, incluidas sanciones a limitar las capacidades de exportación de Rusia a Europa en el sector energético", dijo Nuland al Comité de Relaciones Exteriores del Senado.
Además, Alemania buscará extender por 10 años el acuerdo entre Rusia y Ucrania sobre el tránsito de gas, dijo Nuland.
"El otro aspecto de este acuerdo [entre EEUU y Alemania por el Nord Stream 2] es el respaldo y la extensión del acuerdo de tránsito entre Rusia y Ucrania, que finaliza en 2024. Buscaremos y ejerceremos presión (…) para buscar otros diez años para Ucrania", dijo la funcionaria.
Alemania y EEUU publicaron una declaración conjunta con respecto a las medidas para apoyar a Ucrania, la seguridad energética europea y los objetivos comunes para la protección del clima.
La declaración también establece una serie de condiciones para el funcionamiento de Nord Stream 2.
El gasoducto Nord Stream 2 fue uno de los principales temas de las negociaciones que se celebraron durante la reciente visita de la canciller de Alemania, Angela Merkel, a Washington.
El proyecto Nord Stream 2 tiene por objetivo la puesta en marcha de un gasoducto que transportaría hasta 55.000 millones de metros cúbicos de gas natural por año desde Rusia a Alemania por el fondo del mar Báltico.
Se oponen al nuevo gasoducto, cuya construcción está a punto de finalizar, Ucrania, que de momento sigue siendo la principal vía por la que el gas ruso llega a Europa, y varios países europeos como Polonia, Letonia y Lituania.
A su vez, Moscú instó en numerosas ocasiones a dejar de politizar este proyecto comercial, que surtirá provecho tanto a Rusia como a la Unión Europea.
No hay comentarios:
Publicar un comentario