La agencia Reuters publica un sondeo en el que prestigiosos analistas financieros coinciden en señalar que el histórico repunte del dólar ha llegado a su fin, que las cosas en Wall Street no pintan bien y que el euro está al alza frente a la moneda estadounidense de cara a 2018.
La premisa es la misma: la reforma de los impuestos que anunció Estados Unidos va a tener consecuencias del todo inesperadas en los mercados y el dólar lo va a notar. Y no precisamente para bien. Por eso desde Reuters, las previsiones han pasado de ser positivas —las de octubre y noviembre- a ser bastante más comedidas.
En cuanto al impacto que puede tener la reforma fiscal que acaba de ser aprobada, los analistas apuntan a que, en el mejor de los casos, ese impacto será ligeramente positivo a corto plazo. Eso ayudaría a detener la tendencia del dólar a debilitarse que hemos visto durante casi todo el 2017 frente al resto de países del G10", señala Roberto Cobo García, estratega del banco BBVA.
El G10 comprende a Bélgica, Canadá, Francia, Alemania, Italia, Japón, Holanda, Suecia, Suiza, el Reino Unido y Estados Unidos.
Cobo también apunta a que, si bien la reforma tendrá sus bondades a corto plazo, a largo plazo acabará por tener consecuencias negativas. El dólar perdió el 9% de su valor frente a las principales seis divisas mundiales durante 2017. El peor dato de los últimos 14 años.
El euro, en su mejor momento
Frente al futuro incierto del dólar, los analistas a los que Reuters ha consultado también coinciden en que las previsiones para la moneda comunitaria para 2018 son las mejores de los últimos tres años. Un buen dato teniendo en cuenta las malas rachas posteriores a la crisis económica con las que ha tenido que lidiar el presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi.
La moneda única valdrá 1,22 dólares durante los próximos 12 meses. Una previsión en la que los especialistas del BBVA —los terceros en la lista de los mejores analistas según Reuters- coinciden.
Los economistas del ING Financial Markets auguran un futuro para la moneda única más prometedor si cabe. El euro alcanzará los 1,30 dólares durante 2018.
Las buenas noticias para la moneda única se deben a la política monetaria del Banco Central Europeo y se basan en que el organismo finalice su programa de compra de activos a finales del año que viene; un escenario que, sin duda, sentará las bases del euro que se perdieron durante la crisis económica.
Las buenas noticias para la moneda única se deben a la política monetaria del Banco Central Europeo y se basan en que el organismo finalice su programa de compra de activos a finales del año que viene; un escenario que, sin duda, sentará las bases del euro que se perdieron durante la crisis económica.
Incluso los analistas que opinan que la reforma fiscal estadounidense puede ser positiva para el dólar lo sitúan por debajo del euro. Y eso a pesar de que se auguró que precisamente esa reforma podría propiciar que la divisa estadounidense estuviese a la par que la moneda única.
Desde Société Générale, Kit Juckes señala que el auge más reciente del dólar en términos reales se alcanzó hace un año, en 2016, y que fue el más bajo de los tres auges que ha habido desde 1980. El analista argumenta que el escenario se debe a que la rentabilidad de los bonos del Tesoro de EEUU apenas ha subido.
Durante los últimos años, China ha invertido muchas energías en convertir el yuan en un competidor serio para el dólar no solo en el comercio internacional o en el mercado petrolero, sino también en cuanto a convertir al yuan en moneda de reserva mundial. El país asiático firmó sus futuros contratos de compra de petróleo en yuanes con opción de convertirlos en oro. Sin rastro del dólar.
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