En el marco de la operación de las Fuerzas Aeroespaciales de Rusia en Siria, los sistemas de misiles teledirigidos rusos С-300V4 descubrieron y apuntaron "en repetidas ocasiones" a los aviones espías y bombarderos estadounidenses, reveló en entrevista al diario Izvestia el comandante de la Defensa antiaerea, Alexandr Leónov.
Pese a "perturbaciones de fuerza mayor" que no lograron impedir el funcionamiento de esos equipos militares, los complejos de lanzamiento de misiles rusos "descubrieron y acompañaron de manera sólida los objetivos", explicó Leónov.
Según el comandante, los pilotos de la aviación táctica estadounidense "reaccionaron de manera bastante nerviosa" al saberse 'acompañados' por los sistemas de defensa antiaerea rusa desde distancias de entre 200 y 300 kilómetros.
Los sistemas С-300V4 rusos fueron desplegados en Siria en octubre de 2016, con el objetivo de defender la base aérea de Jmeimim y la base de abastecimiento rusa en Tartús. Retornaron a Rusia en junio de 2017.
Debieron dejarlos para asustar a los gringos y a los israelíes para que dejen de molestar en Siria.
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