En una entrevista con el canal Rossiya, Peskov dijo que no es partidario de "discutir sobre escenarios del Juicio Final", pero agregó que "la respuesta va a ser dura, evidentemente".
"El destructor fue una herramienta de provocación. El presidente [Vladímir Putin] ha explicado que están tanteando así algunos puntos flojos, tanto en el sistema de vigilancia sobre la integridad de las fronteras como en el sistema de respuesta. Ha sido una provocación consciente y bien planificada", señaló el representante del Kremlin.
Peskov supuso que "semejantes operaciones son planificadas al otro lado del océano", opinó.
El pasado 23 de junio, el destructor británico HMS Defender se adentró tres kilómetros en el espacio marítimo que Rusia reivindica como su mar territorial cerca de la península de Crimea. Después de que militares rusos realizaran disparos de advertencia y lanzaran desde el aire cuatro bombas en la trayectoria del intruso, este abandonó rápidamente el área.
El Gobierno británico negó que hubiera disparos de advertencia, pero las fuerzas rusas mostraron un vídeo que los confirman. Los periodistas británicos que iban a bordo del HMS Defender también corroboraron esos disparos.
El Reino Unido no reconoce la incorporación de Crimea a Rusia y sostiene que el HMS Defender atravesaba el mar territorial de Ucrania de conformidad con las leyes internacionales.
El presidente de Rusia, Vladímir Putin, opinó que la provocación se llevó a cabo después de la cumbre ruso-estadounidense para mostrar que Occidente no respeta la elección hecha por los habitantes de Crimea en el referéndum de 2014.
Estados Unidos, según el mandatario ruso, también se implicó en el incidente, pues un avión espía estadounidense intentó registrar las acciones que emprendían en respuesta los militares rusos.
La OTAN en Europa
Además, el portavoz del Kremlin denunció que la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) desestabiliza el continente europeo.
"El bloque se creó para el enfrentamiento y la confrontación. Sigue cumpliendo estas funciones, porque no está enfocado en nada más. No aporta ninguna estabilidad al continente. Al contrario, es un elemento desestabilizador", dijo.
En cuanto al diálogo entre la Alianza Atlántica y Rusia, señaló que de momento es imposible por los ultimátums que impone la contraparte.
"Ahora, a pesar de los intentos de retomarlo [el diálogo], nos enfrentamos a un intento de imponernos una agenda. Además, en forma de ultimátum. Esto hace imposible tal diálogo", sostuvo.
Peskov reiteró el interés de Moscú en normalizar las relaciones con la OTAN.
En este contexto, destacó la importancia de las relaciones de Rusia con Turquía, que forma parte del bloque.
"Turquía es un país de la OTAN, pero al mismo tiempo, nuestras relaciones con Turquía siguen siendo un ejemplo de que incluso con los miembros de la OTAN (...) es posible y necesario construir una cooperación", expresó.
El portavoz añadió que también es una muestra de que, a pesar de que EEUU encabeza la Alianza, sus miembros pueden "mantener su soberanía".
"Por lo tanto, las relaciones con Turquía en este contexto son muy importantes y, más bien, estas relaciones contribuyen a estabilizar nuestra región", agregó Peskov.
Diálogo entre Rusia y la Unión Europea
El diálogo entre Bruselas y Moscú debe reanudarse, declaró Peskov.
"Ni siquiera hablo de normalización, solo de intento de reanudar el diálogo que es tan necesario para Bruselas y Moscú", señaló.
A finales de junio, la canciller alemana, Angela Merkel, constató que los líderes de la Unión Europea muestran un progreso en el reconocimiento de la necesidad de un diálogo directo con Rusia.
La líder germana reconoció que "las relaciones entre Rusia y la Unión Europea en la actualidad realmente no se pueden llamar buenas", y recordó que "incluso durante la guerra fría, la gente hablaba", pues "la ausencia de un diálogo no conduce a la solución de los problemas".
Según Merkel, los países de la Unión Europea deben discutir con Moscú temas como el proceso de Minsk para Ucrania, la situación en Bielorrusia, así como las cuestiones estratégicas del desarme, la paz y la seguridad, el futuro de Siria y Libia.
El pasado 23 de junio, el periódico The Financial Times comunicó, citando a fuentes diplomáticas, que el presidente francés Emmanuel Macron y la canciller alemana se pronunciaron a favor de recuperar el diálogo con Rusia mediante una cumbre de la Unión Europea como la celebrada en Ginebra entre Joe Biden y Vladímir Putin.
Al día siguiente, Peskov confirmó que esa iniciativa fue presentada por Merkel y apoyada por el líder francés.
Sin embargo, la propuesta suscitó el rechazo de varios miembros de la Unión Europea, en particular Países Bajos, Rumanía y las naciones del Báltico.
No hay comentarios:
Publicar un comentario