Según ha informado este viernes el portal ruso de aviación Avia.Pro., la parte estadounidense acusó al Ejército ruso de utilizar “deliberadamente” sistemas de guerra electrónica contra el destructor USS Ross de la Armada de EE.UU. y los buques de guerra ucranianos, que están realizando ejercicios militares cerca de Crimea.
Conforme a la versión proporcionada por Washington, como resultado del poderoso impacto, el sistema de navegación del destructor de misiles estadounidense quedó “inutilizado”.
Militares estadounidenses insistieron en que un ataque de dicho tipo puede resultar muy peligroso, ya que, debido a una “interrupción” en el funcionamiento del sistema de navegación, los barcos aliados pueden incluso atacarse entre sí por error.
EE.UU. se ha manifestado preocupado por el uso por Rusia del Sistema de Identificación Automática (AIS, por sus siglas en inglés) ruso que ha sido una alternativa para el estadounidense GPS (siglas en inglés de Sistema de Posicionamiento Global). De hecho, la parte estadounidense cree que el uso del nuevo sistema ruso AIS supone un intento por desarrollar una ventaja comparativa en la focalización y el desarrollo de capacidades de falsificación de geolocalización, precisa el informe, citando a expertos.
Todo eso se produce en momentos de alta tensión entre Rusia y el Occidente. En la actualidad la tirantez se ha agudizado por el elevado nivel de actividades de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) cerca de las fronteras del país euroasiático.
En fechas recientes, el Gobierno ruso ha denunciado que Washington y sus aliados están convirtiendo el mar Negro en una zona de confrontación e inestabilidad.
Es más, el 23 de junio, los guardacostas rusos interceptaron el destructor de la Marina británica HSM Defender mientras se adentraba en las aguas territoriales de Crimea y obligaron al destructor a cambiar de rumbo previo disparos de fuego de advertencia.
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