Esta tarde se registraron los primeros enfrentamientos entre las fuerzas militares de Venezuela y las tropas de la Guyana, esto motivado por tratar de mantener el control sobre el Esequibo, una región rica en petróleo y minerales disputada por ambas naciones sudamericanas.
Venezuela desde hace muchos años que reclama la soberanía sobre la región en cuestión, no obstante, el gobierno de la Guyana ha comenzado la extracción del petróleo ubicado en el subsuelo de dicha región en disputa, motivo por el cual el presidente Nicolas Maduro ha ordenado la intervención militar para impedir que la Guyana siga explotando sus recursos naturales sin el consentimiento de caracas y considerando que la región está en disputa actualmente entre ambos países.
No olvidemos que recientemente la corte internacional de justicia había fallado en favor de la Guyana francesa con respecto a la disputada región limítrofe del Esequibo; situación que enfureció a Caracas, por lo que el gobierno venezolano trató de anular dicha resolución.
Recordemos que a pesar del mote de "corte internacional de justicia", este organismo internacional no es reconocido por muchos países, y sus resoluciones no tienen validez jurídica vinculante reconocida por la ONU, ni por muchas otras naciones del planeta.
Y tampoco olvidemos que este mismo organismo recientemente había fallado en contra del presidente ruso, acusándolo de crímenes de guerra y girando una orden de aprensión en contra del mandatario ruso; no obstante, no existe país en el mundo que se atreva a cumplir la orden dictada por la corte internacional de justicia en contra de Vladimir Putin, porque nadie se atreve a enfrentar militarmente a Rusia, situación que se presentaría si fuese detenido el presidente de la federación rusa en un tercer país.
Muchos dirán que Ucrania sí que está enfrentando a Rusia, no obstante, en realidad es la misma OTAN la que está confrontando a Rusia en territorio de Ucrania, o, más bien, en ex-territorio de Ucrania; lo que quiere decir que en realidad Rusia no se está enfrentando solamente a Ucrania, sino que en realidad mantiene un conflicto abierto con más de 50 países a la vez.
Pues bien, pese a que la corte internacional de justicia haya fallado a favor de la Guyana francesa, en realidad este fallo tiene poca transcendencia, pues, así como nadie se atreve a cumplir la orden de aprensión girada contra Vladimir Putin, nadie intervendrá en el conflicto entre Venezuela y la Guyana francesa; claro, nadie se atreverá si los aliados de Venezuela se posicionan abiertamente del lado de Caracas, aliados como la misma Rusia de Vladimir Putin y la China de Xi Jinping.
Consideremos que la corte internacional de justicia es en realidad un organismo internacional parcial controlado por Washington y sus aliados (aunque el mismo EEUU no forma parte de la Corte internacional de justicia y, por lo tanto, no reconoce sus dictámenes), de ahí el por qué haya dictado la orden de aprensión contra Vladimir Putin y el por qué haya fallado a favor de la Guyana francesa.
Este conflicto apenas comienza y, por lo tanto, es difícil adivinar como terminará; pero, como lo repito, si Rusia y China muestran su apoyo a Venezuela, es muy posible que se transforme en un conflicto duradero donde es probable que Venezuela finalmente logre triunfar; porque del lado de la Guyana francesa están los países occidentales, mientras que del lado de Venezuela están Rusia, China, Irán, más otros países del Sur global. Por mientras Brasil moviliza unidades militares a la frontera con Venezuela en previsión de lo que pueda suceder, así como para proteger su soberanía. Afortunadamente actualmente en Brasil gobierna un presidente (Lula Da silva) alineado con el eje Rusia-China.