En una reunión con el fiscal general ruso, Igor Krasnov, celebrada este jueves, el presidente de Bielorrusia, Alexander Lukashenko, ha condenado la decisión de Polonia de desplegar armas pesadas, como un tanque Leopardo, cerca de la frontera occidental del país a fin de combatir el creciente flujo migratorio, según ha recogido la agencia local de noticias BelTA.
“[Los polacos] solo están buscando excusas para acercar sus fuerzas a nuestro país”, ha dicho el mandatario bielorruso.
De acuerdo con Lukashenko, las autoridades bielorrusas actuarán con “contundencia” ante toda medida transgresora de Polonia, mientras que ha advertido que su aliado, Rusia, sigue de cerca los movimientos y tomará una postura más dura hacia Varsovia.
“Por supuesto, sabemos que nuestra reacción será dura. Esperaremos, pero les haremos una alerta. Bielorrusia y Rusia actuarán de forma contundente y harán caso omiso a criticismos [de Polonia]”, ha avisado.
La tensión entre Bielorrusia y Polonia ha aumentado recientemente debido al creciente flujo migratorio de bielorrusos que se dirigen a las fronteras con la Unión Europea (UE) por la mala situación económica derivada de las sanciones ilegales impuestas por el Occidente, como Estados Unidos y el bloque europeo, entre otros.
Las autoridades polacas tienen previsto enviar 2500 soldados para ayudar a los guardias a fin de proteger las zonas fronterizas del país ante los migrantes indocumentados. Polonia también desplegará unidades de la Décima Brigada Blindada Ligera, equipada con tanques Leopard, a la ciudad de Biala Podlaska, este de Polonia, en la frontera con Bielorrusia, tal y como recoge la agencia rusa TASS.
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