Disparos y explosiones sacuden el centro de Beirut. El Ejército libanés advierte de que abrirá fuego contra cualquier persona armada que vea en la capital del país y pide a los civiles que se queden en casa. La escalada de violencia surgió a raíz de un ataque contra manifestantes que dejó al menos 5 muertos y 16 heridos.
En la mañana se sintieron intensos tiroteos en el vecindario Tayune, en Beirut. El Ejército envió equipos con ametralladoras de gran calibre a la zona. Las tropas abrieron fuego contra el edificio donde se esconden los combatientes armados que supuestamente participaron en el mortal ataque contra los manifestantes, informó un corresponsal de Sputnik.
"El Ejército acordonó la zona, se dispersó por los barrios y en las entradas a los mismos. Ha comenzado el patrullaje, así como la búsqueda de los tiradores para detenerlos", publicó el organismo en su cuenta de Twitter.
Previamente, los medios informaron de seis fallecidos y más de 60 heridos por el tiroteo ocurrido en el área de Tayouneh de la capital libanesa.
Tiroteo mortal durante una manifestación de protesta
En la mañana, los simpatizantes de partidos chiítas salieron a las calles para demandar la destitución de Tarek Bitar, el juez principal en el caso de la explosión en el puerto de Beirut en 2020. El martes los medios informaron que Bitar emitió una orden de arresto contra el exministro de Energía libanés Alí Hassan Khalil.
Según los informes, unos manifestantes fueron tiroteados en el barrio de Badaro de Beirut cuando se dirigían al Palacio de Justicia para exigir la dimisión del juez. Se reportaron también al menos dos explosiones cerca del sitio donde debía tener lugar la protesta.
Los movimientos chiítas Hizbulá y Amal piden a sus partidarios que no caigan en las provocaciones tras el tiroteo. En su declaración conjunta, los movimientos expresaron su creencia de que el ataque a los manifestantes tenía como objetivo "sumir al país en un conflicto".
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