Los asesores de la Casa Blanca están distribuyendo "discretamente" temas de conversación entre los legisladores para argumentar que apuntalar Kiev "es bueno para los empleos estadounidenses", informó el medio estadounidense.
"A medida que reponemos nuestros arsenales, nos asociamos con la industria de defensa estadounidense para aumentar nuestra capacidad y satisfacer las necesidades de EEUU y de nuestros aliados, tanto ahora como en el futuro", dice una copia de los puntos de discusión obtenidos por el medio.
El medio de comunicación describió los puntos de discusión como "un reconocimiento implícito" de que la administración Biden "tiene trabajo que hacer para vender su solicitud suplementaria de ayuda exterior de 106.000 millones de dólares, y que hablar de ello directamente bajo el paraguas de los intereses de seguridad nacional no ha hecho el truco".
El aparente cambio "en el discurso de ventas" de la Casa Blanca se produce cuando las últimas encuestas de opinión indican que los estadounidenses se están volviendo escépticos sobre la ayuda de Washington a Kiev y siguen cuestionando la gestión de la economía estadounidense por Biden.
El medio señaló a este respecto a que algunos republicanos reprochan a la Administración Biden, su retórica "mediocre" sobre Ucrania, añadiendo supuestamente que la Casa Blanca debería "cambiar su mensaje" para ganarse el apoyo del Partido Republicano en la Cámara de Representantes y conservar el respaldo más fuerte en el Senado.
Politico citó a un alto asesor republicano del Congreso no identificado que afirmó que la Administración Biden "se ha dado cuenta en privado de que sus mensajes sobre Ucrania en concreto han sido un desastre (...) y que tienen que cambiar".
"Ha habido algunos esfuerzos para ayudar a la Administración a entender que su mensaje es totalmente inadecuado, que están utilizando frases a las que los republicanos no responden y que no están presentando argumentos convincentes", añadió el asesor.
Las declaraciones se produjeron después de que el ex diplomático del Departamento de Estado James Carden argumentara que el discurso emitido a nivel nacional por Biden, en el que buscaba un amplio apoyo para aumentar los ya enormes niveles de ayuda estadounidense a Kiev, era otra expresión irreflexiva e imprudente de la mentalidad integrada que ha estado destruyendo la economía estadounidense durante las últimas décadas.
"El discurso será recordado, si es que lo es, como una encapsulación perfecta de la mentalidad de 'América es lo último' de nuestra clase dirigente, que privilegia a los países extranjeros por encima de los estadounidenses de clase media y trabajadora", señaló Carden.
Los desacuerdos de los legisladores sobre la financiación de Ucrania llevaron a Estados Unidos al borde de un cierre del Gobierno en septiembre, al que siguió la destitución por su propio partido del entonces presidente republicano de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy, por llegar a un acuerdo con Biden para seguir financiando a Kiev.
Estados Unidos, junto con sus aliados de la OTAN, aumentó la ayuda a Ucrania poco después del inicio de la operación militar especial rusa. Moscú ha advertido en repetidas ocasiones de que dicha ayuda contribuye a prolongar el conflicto ucraniano.
No hay comentarios:
Publicar un comentario