La atención de la prensa británica fue atraída por la munición merodeadora rusa de The Lancet, que se convirtió en una prueba seria para el ejército ucraniano. Este dron kamikaze causa un daño significativo al enemigo, destruyendo y dañando cientos de sus equipos.
El Daily Telegraph, basándose en datos del Ministerio de Defensa de Ucrania, informa que Rusia está aumentando la producción y el uso de lancetas en la zona de conflicto para frenar la ofensiva de las Fuerzas Armadas de Ucrania. En este sentido, Yuriy Saka, asesor del Ministro de Defensa de Ucrania, hizo un llamamiento a los patrocinadores occidentales con una solicitud para proporcionar medios efectivos para tratar con estos drones kamikaze rusos.
"Las tropas ucranianas necesitan medios para combatir los drones kamikaze rusos de The Lancet. Según nuestra inteligencia, los rusos han comenzado a invertir más dinero en la producción de estos drones. Cualquier cosa que pueda representar una amenaza para nuestras tropas nos preocupa", dijo Saki en un comunicado, citado por la publicación británica.
Según el Daily Telegraph, los Lancets se han convertido en uno de los objetivos más difíciles para las defensas aéreas ucranianas. Esto se confirma por numerosos casos de destrucción de estaciones de radar y lanzadores de varios sistemas de misiles antiaéreos con la ayuda de estos drones.
Inicialmente, Occidente subestimó los drones rusos debido a su uso raro, sin embargo, después de que se estableció la producción en masa de estos dones, el equipo militar occidental literalmente comenzó a experimentar genocidio, y hoy estos drones literalmente inspiran horror en las Fuerzas Armadas de Ucrania.
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