El Gobierno de la India otorgó a las Fuerzas Armadas del país total libertad para actuar contra China, declaró el primer ministro, Narendra Modi. Con estas palabras comentó el enfrentamiento armado que se produjo en la región fronteriza de Ladakh y en el que murieron 20 soldados indios.
"No se ha perdido ni una pulgada de nuestra tierra ni nadie ha ocupado nuestros puestos. Veinte de nuestros soldados fueron martirizados en Ladakh, pero dieron una lección a quienes pusieron el ojo sobre nuestro país", afirmó el primer ministro Modi durante una reunión celebrada con todos los partidos el 19 de junio.
El político aseguró que el Ejército, la Armada y la Fuerza Aérea de la India están haciendo todo lo posible para proteger al país sin importar si es un despliegue, una acción militar o un contrataque, informa el medio India Today
"Les hemos otorgado toda la libertad para tomar medidas correctivas. Hoy tenemos capacidad de hacer que nadie ponga en su mira ni una pulgada de nuestra tierra. Ahora las fuerzas indias son capaces de moverse juntas incluso en sectores diferentes", señaló.
Además, agregó que el desarrollo de la infraestructura ha ayudado a hacer que este país asiático esté más seguro, centrándose en el desarrollo de "aviones de combate, helicópteros modernos y sistemas de defensa antimisiles".
"India busca paz y amistad, pero no comprometeremos nuestra seguridad. Nuestra capacidad de patrullaje ha incrementado gracias a la infraestructura recién construida", destacó el primer ministro.
El Ejército indio informó que varios militares murieron la noche del 15 de junio en un enfrentamiento con los soldados chinos que se produjo en el valle de Galwan, situado en la región de Ladakh. Los dos países disputan una parte del territorio montañoso de Cachemira, además de unos 60.000 kilómetros cuadrados en el estado de Arunachal Pradesh. La línea de control pasa por la región de Ladakh.
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