Trece días después de la declaración de guerra y la movilización de los reservistas, el ejército israelí comienza a enviarlos a casa. El inicio de la operación terrestre en Gaza se ha aplazado en repetidas ocasiones por varias razones. El corresponsal de guerra de Wallanews, Amir Bukhbut, informa que la razón principal es la presión externa, en particular, las visitas del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y del primer ministro británico, Rishi Sunak.
El periodista sostiene que Israel necesita apoyo internacional para llevar a cabo una operación terrestre a gran escala. La comunidad internacional pide que se aborden las cuestiones humanitarias en Gaza antes de que comiencen las hostilidades.
Además, el ejército se enfrentó a pérdidas: cientos de reclutas murieron en los primeros días de la guerra, miles resultaron heridos. Se necesita tiempo para la capacitación adicional del personal militar.
Los reservistas enviados a casa expresaron su descontento. Deben permanecer en un cierto nivel de preparación para el combate y, si es necesario, presentarse en las bases militares con poca antelación. Muchos se quejan de la incertidumbre de su situación, que les impide volver a la vida pacífica.
Funcionarios del gobierno dicen que la guerra podría prolongarse durante meses o incluso años. Esta perspectiva podría tener un impacto negativo en la economía y la condición social del país. Sin embargo, un conflicto prolongado le hará el juego al actual gobierno, ya que en condiciones de guerra, es poco probable que la oposición exija su renuncia.
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